El poder adquisitivo de los asturianos se desploma más de un 8% en lo que va de año

Así se desprende de un informe presentado este martes por el secretario general de UGT Asturias, Javier Fernández Lanero, sobre la situación económica y laboral de la región. «Se presenta un otoño difícil», sentenció el líder sindical, que urge un pacto entre los distintos agentes sociales «para repartir entre todas las partes» los efectos de la crisis: «Necesitamos recuperar la mesa de diálogo y consenso que hubo con el coronavirus».

Lanero abogó por incrementar los salarios y «topar los precios de los productos básicos» como receta para sobrellevar «la recesión en la que entraremos muy probablemente» tras el verano. «Es la única forma de salir de esta crisis, fomentando el consumo y manteniendo el poder adquisitivo de las personas», expuso durante la presentación, en la Feria Internacional de Muestras de Asturias (Fidma), de un informe que bebe de fuentes oficiales y en el que se asegura que un 10,3% de los hogares -es decir, 1 de cada 10- llega con dificultad a final de mes.

«Todo ha subido menos los sueldos», subrayó Lanero. A la caída del poder adquisitivo que se registró hasta el mes de julio, se suman los efectos de la crisis anterior. Las familias asturianas, de hecho, todavía no han recuperado los seis puntos porcentuales en los que se redujo su capacidad de compra entre 2010 y 2021. A día de hoy, según los datos aportados por UGT, el 32% no puede permitirse una semana de vacaciones al año; el 26,5% no tiene capacidad de afrontar gastos imprevistos; el 14% no puede mantener su vivienda a una temperatura adecuada; y el 7,6% ha tenido que aplazar el pago de las facturas de luz y gas, la hipoteca o el alquiler.

La inflación y la consiguiente merma de la capacidad salarial no son las únicas cicatrices de la crisis desatada con la pandemia del coronavirus y la invasión rusa de Ucrania. La tasa de empleo en Asturias, del 43,6%, es la más baja del país y 1 de cada 4 jóvenes de menos de 25 años busca sin éxito trabajo en la región. Reseñar también que casi la mitad de los parados asturianos lleva más de un año en situación de desempleo; que se destruyeron 1.900 puestos de trabajo en el primer semestre del año; y que la población activa ha caído hasta el punto de situar la tasa de actividad en el 49,4%, nueve puntos porcentuales por debajo de la media nacional.

«Estamos creciendo con respecto al año pasado, pero poco», considera el secretario general de UGT, que este martes destacaba «la resistencia» del sector industrial, que ha remontado el revés económico sufrido en los meses de marzo y abril, aunque su crecimiento interanual sigue estando por debajo de los valores registrados a nivel nacional. Prueba de que «la industria asturiana parece ser el sector que mejor está resistiendo la coyuntura actual» es que ha generado 3.700 nuevos puestos de trabajo.

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, la AIReF, sostiene que la economía asturiana ha sufrido una ralentización de su crecimiento en el primer semestre de 2022. Y la plataforma de estudios económicos del BBVA pronostica que la región cerrará el año en peores circunstancias económicas que el resto de España.

«Necesitamos recuperar la mesa de concertación. Las medidas consensuadas son más fáciles de aplicar», reivindicó Fernández Lanero. «Las medidas energéticas, por ejemplo, se pusieron en marcha sin contar con los agentes sociales, sin explicarlas a los trabajadores o los autónomos», dejó caer.