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Buena parte de la plantilla de Santa Bárbara Sistemas vería con buenos ojos pasar a manos de Indra, que el Estado recuperara, al menos ... en parte, la propiedad que en su día tuvo, antes de su privatización en 2001, con la compra de la empresa por parte de General Dynamics por apenas cinco millones de euros. La guerra abierta entre la multinacional americana e Indra, que tiene detrás al Gobierno, por la explotación de la fábrica de Trubia genera gran intranquilidad entre los trabajadores. Sobre todo, al calor de la declaración del presidente de la compañía semiestatal, Ángel Escribano, en el Congreso, en la que deslizó que desde El Tallerón «tendremos que competir contra nosotros mismos», en referencia a Tess Defence, el consorcio que lidera la propia Indra, con Escribano, Sapa y Santa Bárbara Sistemas, que tiene adjudicado el megacontrato del VCR 8x8.
Ante la negativa de General Dynamics a vender Santa Bárbara, el gran temor es que el Ejecutivo deje de confiar en la centenaria factoría de Trubia para apostar por las nuevas opciones que se plantean para Asturias. Una suma de contratos nacionales e internacionales mantienen la actividad en los últimos tiempos y las palabras de Escribano criticando duramente a la multinacional americana, aunque hechas a título personal, trasladan también un enfrentamiento con el Gobierno que podría implicar la pérdida de pedidos.
De momento, los trabajadores ya aguardan con cautela los próximos meses, en los que podría bajar la carga de trabajo debido a los retrasos en el programa 8x8 con su respectivo impacto en el empleo.
El anuncio de que Indra adquirirá El Tallerón de Duro Felguera ha tenido también repercusiones en Oviedo. A pesar de la elección por parte de la compañía semipública de las instalaciones gijonesas, el acalde de la capital, Alfredo Canteli, se mostró ayer confiado en que «Indra estará primero o más tarde también en Oviedo». El regidor apuntó la necesidad de confiar en la empresa y también en la factoría de Trubia. «Hay que creer en Indra, hay que creer en Santa Bárbara, que está aquí, gracias a Dios, y que está creciendo, ya veis que salen nuevos contratos ahora», señaló Canteli, en referencia a los pedidos por 50 millones de euros asignados a la planta y hechos públicos el jueves por General Dynamics ante la ofensiva de Indra por comprar las instalaciones. La capital se ha postulado también para acoger el centro de Tess Defence.
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