Poco importaba esta mañana la intensa lluvia que caía sobre Gijón. Tampoco la atenda mirada de dos patrullas de la Guardia Civil. Más de un centenar de trabajadores se movilizaron a las puertas de la entrada en Sotiello de ArcelorMittal una vez que la compañía decretase ayer el cierre patronal en la acería de Gijón hasta que dure la conflictividad. ... Esta medida supone dejar sin cobertura -ni sueldo ni paro- a los 320 trabajadores de esta instalación. La concentración de hoy coincidía con el cambio de turno, a las 14 h, aunque desde mediodía ya se agolpaban multitud de personas en las puertas. El mensaje era coincidente: «Ahora mismo estamos todos en la calle», repetían. Eduardo Llaneza explica que «estábamos en una situación de bloqueo en la negoación por parte de la empresa, entendimos que teníamos que dar un paso al frente y comenzamos unos paros que empezaron a tener efectividad desde el día de ayer». Estos paros son los que comenzaron el 25 de noviembvre con caracter indefinido y de dos horas por turno. De fondo, la exigencia de las centrales sindicales para que se retierase la propuesta de suprimir 23 puestos en la fábrica.
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Y de aquello a esto. A la llamada de ayer a las 15h de la tarde para que los representantes sindicales se personan en La Granda para comunicarles el cierre patronal del taller de acería. «Al parecer dicen que estamos poniendo en riesgo la instalación y que no pueden garantizar la seguridad de los trabajadores», señala otro trabajador en la planta gijonesa. El secretario general de CC OO de Industria de Asturias, Damián Manzano, acudió esta mañana a las puertas donde se movilizaban y desde allí subrayó que «este cierre patronal es ilegal» y amenazó con que «esta situación se extienda a otras instalaciones siderúgicas». De momento, y aunque la concentración fue totalmente pacífica, sí que hubo que contener algunos intentos, que no quedaron en más que protestas, de trasladar también el bloqueo a la entrada de Arcerlor por Veriña.
De hecho, mucho de lo ocurrido durante las dos horas que se congregaron, fue la improvisación y la impotencia ante una situación que, en estos momento, supone haber mandado a 320 operarios para casa y sin sueldo. «¡Nos dejan en la calle, sin empleo!», señala Félix Álvarez. Nos vemos obliados a interrumpir la charla con él. Se ha organizado una asamblea, no oficial, improvisada para dar cuenta de las útimas novedades. Toca hacer pedagogía con lo que supone un cierre patronal y cuáles serán los siguientes pasos a dar por parte de los trabajadores. La intención es que, todos aquellos que puedan, acudan mañana a la cita -si se produjese, a estas horas por confirmar- en mediación. Sino, de nuevo a la entrada de la fábrica. «Aquí el peligro de llama Mitta, pero para Asturias entera», nos dice Manuel Pulgar (CSI) antes de arrancar sus palabras antes los asistentes.
Poco antes, el secretario general de CC OO en Asturias, José Manuel Zapico, se había sumado a la protesta para dar su apoyo a los trabajadores. «El gobierno asturiano tiene que dejar claro que está del lado de la legalidad ante una decisión unilateral de Arcelor que es manifiestamente irregular porque pone a los trabajadores en una situación muy complicada rechazando el diálogo social y de muy mala fe».
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El gobierno del Principado respodió esta misma mañana. A preguntas de los periodistas, la portavoz del Ejecutivo, en la rueda de prensa semanal tras el Consejo de Gobierno, manifestó la «preocupación» e instó a «agotar las vías del diálogo» de cara a «evitar un gravísimo daño económico y laboral». Álvarez, pidió que se trabaje en solociones para «evitar consecuencias negativas que nadie desea y que serían de una trascendencia más que importante para Asturias».
Esta misma mañana, y tras una reunión en la Dirección General de Empleo, el Comité de Empresa ha presentado una denuncia ante Inspeccion de Trabajo. Damián Manzano exigió a la que se siente a negociar un plan de viabilidad para la división de Largos, que es lo que se revindica en esta huelga, «y no hacer cuestiones que están al margen de la ley como hizo con el ERTE y ahora con este cierre». De momentó, según específicó el secretario general de CC OO en ArcelorMittal, José Manuel Castro, «nadie de la empresa se ha puesto en contacto con nosotros». Además, fuentes sindicales indican que tampoco lo ha hecho ningún miembro del Ejecutivo autonómico.
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Situacion como esta, de cierre patronal, no se dan todos los días. Aunque los más viejos del lugar, nos recuerdan que ya vivieron una situación similar en 2010 que conllevó el cierre durante 5 días. Otros, ya se remontan a una situación anterior en los años 90. Por ello, ahora toca organizarse. Los hay que piden, en esa asamblea improvisada, que se usen los grupos de Whatsapp, otros la comunicaciones habituales vía email. Todo ha llegado de golpe, y probablemente sin muchos flecos por concretar. «Estos es un abuso de la empresa, que nos manda para casa para callar las protestas que teníamos ante la destrucción de empleo y el aumento de carga para los que quedábamos», añade Pulgar.
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NOELIA A. ERAUSQUIN
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