La huelga del transporte obligará a parar a la mayor parte del sector del metal asturiano

El pasado día 14 comenzaban unas protestas que están teniendo en Asturias un seguimiento masivo. Los camiones que se mueven en el ámbito industrial lo hacen a cuentagotas y solo para sostener las cuestiones más básicas, como algunos procesos industriales que no se pueden parar. Pero el grueso de la industria está sufriendo un ahogamiento por la imposibilidad de recibir materiales y expedir los bienes ya producidos. «Quienes hicieron un buen aprovisionamiento ya tienen los almacenes llenos de producto y se van quedando sin materias primas». Los que no lograron hacer el acopio suficiente, también están abocados a la parada si la situación no cambia.

El presidente de Femetal, Guillermo Ulacia, ya alertó en la primera semana de los paros de que el margen de estas empresas era estrecho y que se iría viendo una reducción paulatina de la actividad por falta de materiales críticos. Los procesos de fabricación de muchas empresas necesitan de materiales, pero, en muchos casos, también de productos químicos que no están llegando y que obligan a parar procesos. La cadena puede seguir adelantando trabajo en otras líneas, pero sin recepción y expedición, están abocadas a la parada.

Esa decisión ya ha tenido que tomarla Moreda Riviere Trefilerías. La empresa radicada en Gijón ha presentado un ERTE para 206 de sus 243 trabajadores después de encontrarse con la imposibilidad de conseguir alambrón, nitrógeno o cal, entre otras materias primas.

El sector del metal es uno de los más importantes de la región. El último informe laboral de Femetal, correspondiente al cuarto trimestre del pasado año, apunta que son 31.000 los empleos con los que cuenta el sector en la región, cifra que supera los 40.000 si se incluyen las actividades de servicios y comercio vinculadas. El metal aporta un 11% al PIB de la región y supone el 70% de las exportaciones asturianas, con una cifra de negocio anual que supera los 6.300 millones de euros.

Las del metal no son las únicas empresas que están pasando por un momento complicado. La mayor parte de los sectores productivos se ven afectados por los paros, que alcanzan muchas ramas de actividad. Un ejemplo es el Grupo El Gaitero, que ha tenido que detener el proceso de embotellado por falta de vidrio. Las previsiones de la empresa, según explicó su director general, Ricardo Cabeza, pasan por colocar a 20 de sus 70 trabajadores en turnos de rotación con vacaciones y trabajos de limpieza y orden en las instalaciones. «El ERTE sería lo último. Vamos a darnos quince días para ver cómo se desarrolla todo». Su directora comercial y de marketing, en declaraciones a 'RNE', explicó ayer de forma gráfica la situación actual de a empresa. «No tenemos botellas, etiquetas ni nada de lo que necesitamos para la producción. Tenemos parados varios contenedores de envíos».

El Principado, la Federación Asturiana de Empresarios (Fade), CC OO, UGT y la Unión de Consumidores de Asturias ya reclamaron el sábado a los transportistas que alcancen acuerdos que permitan levantar los paros y reconducir la situación. No obstante, los convocantes, la Plataforma para la Defensa del Transporte mantienen la protestas. La Delegación del Gobierno en Asturias informó ayer, de hecho, del corte de un carril en la A-8 a la altura de El Franco por quema de neumáticos que provocó el choque de tres vehículos. No se produjeron daños personales.