Un grupo de inversores lanza una cerveza asturiana y proyecta una fábrica en Siero

La primera pregunta que cabe hacerse es el por qué de la idea. «A través de una marca de cerveza muchos países del mundo han sido testigos de grandes momentos de su historia. Y creíamos que Asturias debía tener la suya propia». Lo explica José Manuel del Olmo, uno de los socios fundadores, junto al músico y hostelero Frankie Delgado. El primero aporta su visión en el desarrollo empresarial (ha sido director general de Heineken o presidente y fundador de Brabante Cervezas, y actualmente es consejero de Cervezas Chula de Madrid) y el segundo, su experiencia en el mundo de la cerveza y en el desarrollo de producto. Y, junto a ellos, otro conjunto de asturianos que aportan el «componente muy de corazón de tierra» como Álex Lawton, Sergio Maldonado o Silvia Fernández. «No es un producto con el que únicamente busquemos una rentabilidad, que obviamente tiene que haberla, sino que existe un importante componente emocional detrás del proyecto», añade.

El segundo por qué se dirige hacia el nombre: 'La Cruz de Asturias'. No se trataba, dicen, de «adueñarse» de la Cruz de la Victoria, el símbolo por excelencia y patrimonio universal de los asturianos, pero sí «pensando en nuestras raíces celtas y la parte más visigoda podemos utilizar una cruz como símbolo principal de nuestra marca». Y de complemento, la tierra, como otras marcas cerveceras tipo Estrella Galicia. De esta manera 'La Cruz de Asturias' se convierte en una alegoría total al sentir regional.

Y con todo el 'envoltorio' resuelto -un diseño que surgió en el rincón innovador gijonés de La Pipa, «el hogar espiritual» de la cerveza», según Álex Lawton- se definió un producto «bebible y cercano», una «cerveza artesanal, que no artesana», y, sobre todo, «una alternativa a las marcas nacionales». «Por eso nuestro producto es una especie de refresco de cerveza que cuenta con dos versiones, rubia y tostada y que saldrá tanto en barril como en botella», apunta Del Olmo.

La primera 'cosecha' se ha llevado a cabo en Noreña, pero la idea de los fundadores de la empresa es que, tras el asentamiento y expansión del producto a escala regional y nacional, se pueda montar una fábrica propia para su desarrollo. El plazo para ello sería 2023 y el lugar de ubicación también está totalmente definido. Será el municipio de Siero.