El fallo del Supremo sobre Técnicas Reunidas avala la tesis Duro en su guerra con Hacienda

Duro Felguera lleva años litigando por un motivo similar. Hacienda le reclama más de 120 millones de euros por las rentas obtenidas por la UTE Termocentro, en Venezuela. La compañía asturiana defiende que los ingresos logrados por uniones temporales de empresas que operan fuera de España deberían beneficiarse de cierta exención, algo que no comparte el fisco.

La Audiencia Nacional, de forma directa o indirecta, ya ha respaldado a Duro Felguera al menos tres veces por el pago del Impuesto de Sociedades de su filial. La lucha con Hacienda se remonta a una inspección de 2015 sobre el periodo 2010-2012 en la que se determinó el abono a las arcas públicas de 120 millones de euros.

En 2020, la Agencia Tributaria le llegó a reclamar el pago inmediato de esa cuantía más intereses y, de hecho, le notificó el embargo de inmuebles para hacer frente a esa deuda. Sin embargo, posteriormente, Duro logró que la Audiencia Nacional dejara en suspenso esa petición.

La decisión del Supremo sobre el caso de Técnicas Reunidas avala la tesis que defiende Duro, que entiende que el suministro realizado fuera del territorio español para un destinatario no español «debe considerarse en todo caso como operar en el extranjero».