«Entendemos que el seguimiento del paro del transporte será como en marzo»

-¿Por qué consideran insuficiente el ofrecimiento del Gobierno de un plan de inspección?

-Porque el Gobierno directamente no está inspeccionando. Además, la subdirectora general de Inspección de Transporte dio orden de no revisar la nueva carta de porte en las inspecciones que hacía de oficio la Guardia Civil, donde es obligatorio incluir el precio. Lo que queremos es que el propio cargador sepa el precio que lleva el transportista para saber lo que se queda el intermediario.

-¿Qué seguimiento espera del paro?

-Entendemos que el seguimiento va a ser el mismo que hubo en marzo. Ahora dicen las asociaciones de transporte que no apoyan, pero nunca lo hicieron realmente. Llevan 30 años sin hacer nada o yendo en contra del transportista en la mayoría de los casos.

-Pero en marzo tuvieron el apoyo de UITA y Cesintra en Asturias.

-En marzo, teníamos el apoyo de UITA, que formaba parte de la plataforma, pero se separó y no entendemos por qué, ya que no hay ninguna reclamación nueva, se pide que se cumpla lo que había. Pero Cesintra no apoyó el paro desde el primer día, sino desde el cuarto, porque sus socios, que estaban parados, les obligaron a dar el paso. ¿Qué pasará cuando llevemos tres o cuatro días parados? Lo mismo, dirán que apoyan o se quedarán sin socios. Me imagino que tienen presiones del Gobierno por las subvenciones que reciben.

-¿La situación no ha mejorado desde marzo?

-Hubo un paro y cuando finalizó, sobre todo en el norte, subieron algo los precios. La situación ha mejorado económicamente, pero de marzo a ahora han vuelto a subir otra vez todos los costes del camión. No solo el gasoil, que vuelve estar a dos euros; las ruedas, que costaban 450 euros más IVA han pasado a más de 600. También han subido los seguros, los peajes, el menú del día, el aditivo AdBlue, los talleres... Incluso los propios camiones: uno que hace tres años costaba 100.000 euros ahora está entre 130.000 y 140.000 euros. Y el remolque más habitual se encareció en torno a 12.000 euros. El porte se subió en aquel momento, pero no volvió a hacerlo más. Hay ciertas cargas que bajan su precio por la oferta y demanda. Los intermediarios del transporte empiezan a ver que hay poca carga y mucho camión y automáticamente lo bajan. No es que lo rebaje el cargador principal, que seguramente está pagando el precio que había después del paro o incluso más. Es el intermediario, que es quien contacta con la fábrica y el transportista efectivo, el que se aprovecha de la situación en la mayoría de los casos.

-¿Se puede evitar trabajar por debajo de costes solo con inspecciones o es necesario también un cambio de mentalidad en el sector?

-La ley que está vigente en Francia obliga a trabajar por encima del coste de explotación. En España lo que hicieron con la ley fue poner el Observatorio de Costes, que tenemos desde hace muchos años, como referencia, no como obligación. Como encima no se hacen inspecciones, se crea un círculo que no es efectivo. Además, por el principio de proporcionalidad incluido en la ley, solo puede denunciar un pequeño a uno grande, y no al revés. Esto en Francia no existe. Y hay que tener otra cosa clara: en España solo puede denunciar el transportista efectivo. Si una asociación quiere intermediar y denunciar en nombre del transportista, no se permite. Es lo que le ha pasado a la plataforma y por lo que el Gobierno dice que no hay denuncias. Pero el transportista puede sufrir coacciones por denunciar al que le da de comer.

-¿No temen que este paro cause tales perjuicios que lleven al cierre de negocios del transporte?

-Se habla de que casi 5.000 pequeños autónomos han cerrado desde el paro de marzo, ya hubo gente que no arrancó. Cuando una economía es tan débil, si paras una fuente de ingreso x días hay riesgo de que haya personas que no aguanten. El problema es que, si sigues trabajando por debajo de costes, igual en vez de cerrar en 15 días lo haces en tres meses. Al final, en algún momento hay que tomar la determinación.

-En el paro de marzo hubo algunos incidentes violentos. ¿Considera que ahora están los ánimos muy caldeados?

-Creo que la gente va a parar el camión directamente y ejercer su derecho sin incidentes violentos. Esperamos que la gente tenga el sentido común de decir: voy a parar el camión porque no puedo trabajar a pérdidas. Incluso esperamos que no se infiltre gente que no pertenezca al sector del transporte para dar una mala imagen.

-¿Cuántas socios tiene la plataforma en Asturias?

-Las cifras las baraja la dirección nacional, no sé el número exacto. Además, hay mucha gente de otras asociaciones, Cesintra, UITA y Asetra en el caso de Asturias, que no es socia, pero luego se unen al paro.

-¿Cómo se organizará el paro en la región?

-Va a ser un poco una copia del paro de marzo. Estaremos en las entradas de las fábricas y demás. Más que nada por informar, pero lo que esperamos es que pare el mayor número de personas por convicción.