S. S. F.
Viernes, 11 de octubre 2024
La Inteligencia Artificial (IA) no es un enemigo del ser humano, sino una herramienta de que la tienen que valerse las personas para empoderarse. Así se manifestó en las últimas Jornadas Tecnológicas organizadas por Telecable en el Palacio de la Riega, en Gijón, y que fueron introducidas por Juan Acuña, director de Telecable. En ellas se contó con la presencia de Joaquín Almunia, exministro y exvicepresidente de la Comisión Europea; y con Andrés Pedreño, Catedrático de Economía Aplicada y experto en IA.
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Ciento cincuenta profesionales de empresas asturianas asistieron al evento que se cerró entregando el primer premio aleluIA a la empresa praviana ebroker.
En el inicio de las jornadas, Juan Acuña destacó la «muy sólida» posición que tiene Telecable en el mercado asturiano, y al respecto señaló que la compañía «no quiere ser vuestro operador de telecomunicaciones, sino vuestro socio tecnológico y acompañaros en vuestra digitalización».
Asimismo apuntó al objetivo de las jornadas, que no fue otro que trasladar a los empresarios las nuevas tecnologías y las tendencias digitales, para que las compañías asturianas las incluyan en sus operaciones. Entre ellas destacó la Inteligencia Artificial, protagonista indudable del evento.
Fue precisamente Andrés Pedreño el que abogó porque la población le pierda el miedo a la Inteligencia Artificial, un miedo «de que la IA vaya por encima del ser humano». Sin embargo, él apuesta porque los seres humanos utilicen la IA «para empoderarse» y la utilicen a pesar de los posibles riesgos que pueda traer consigo. Además, frente a potencias como Estados Unidos o China, el experto en IA señaló la importancia de que «Europa tiene que ser una potencia en economía digital y en Inteligencia Artificial».
El conflicto entre Israel y Palestina, la transición ecológica o el poder de las grandes tecnológicas fueron algunos de los temas sobre los que Joaquín Almunia conversó con Octavio Villa, Jefe de Proyectos Editoriales del diario El Comercio, en la primera charla de la mañana bajo el título: 'Los cambios geopolíticos y económicos que se avecinan: impacto en nuestras organizaciones'.
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Así, los empresarios presentes en el evento pudieron conocer un poco más los entresijos del conflicto de Israel y Palestina. En este sentido, Almunia apuntó al «riesgo» que existe de que el conflicto se «generalice», ya que, tras el bombardeo del territorio israelí por parte de Irán, Israel ha anunciado una respuesta. «No sabemos cómo va a ser esa respuesta, pero va a implicar a más gente», aventuró Almunia.
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Así, el exministro prevé una generalización del conflicto que añada «inestabilidad» un mundo que ya es muy variable por la guerra de Ucrania, las tensiones entre Estados Unidos y China, entre otros. «Un mundo inseguro, con tensiones, un mundo que no conocíamos desde el final de la Guerra Fría», lamentó.
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La situación de inseguridad en Europa también se debe al papel de Vladimir Putin, presidente de Rusia, y «que no es precisamente partidario de la Unión Europea ni de la democracia» y que como potencia nuclear «da mucho miedo».
No obstante, Almunia reconoció que tenemos que vivir en ese mundo y «tenemos que utilizar los instrumentos de la diplomacia, los políticos, las instituciones multilaterales...que nos permita negociar la paz cuando hay tensión, evitar conflictos y dar seguridad a la ciudadanía del mundo».
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También hubo tiempo para hablar de las elecciones de Estados Unidos, que se celebrarán el próximo 5 de noviembre. Un factor más que afectará seguro al mundo global en el que vivimos. «Con (Donald) Trump será muy difícil tener buenas relaciones, con Kamala Harris habrá que reforzar la cooperación y el diálogo con Estados Unidos para que no tienda a relegar su relación con Europa», señaló.
Durante la conversación también se ahondó en un tema como la transición energética en la que España ha ido a la cabeza frente a otros países competidores que lo han hecho de otra forma. «Una cosa es que lo hagan de otra forma, y otra que lo hagan de manera más lenta», puntualizó Almunia. En total son 400.000 millones de dólares son los que ha puesto Estados Unidos en su camino para una economía limpia en emisión de carbono, «y China tiene su forma de gestionar su transición energética y climática». ¿Y por qué lo hacen de forma diferente? Según Almunia porque la UE está formada por 27 estados miembros «con diferentes políticas y mercados energéticos y tenemos otra forma de gestionar».
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No obstante, los objetivos marcados para 2050 –una economía neta en emisiones de carbono– son para Almunia «necesarios y realizables». Sin duda, el exministro ve la transición ecológica como una oportunidad «para aumentar el sistema productivo español para tener una industria nueva, moderna y diferente».
Durante el evento, Telecable hizo entrega del premio aleluIA, un reconocimiento a empresas que adoptan soluciones «robustas e innovadoras» apostando por la tecnología y siendo acompañadas por Telecable a lo largo de su trayectoria, tal y como señaló Juan Acuña. En esta primera edición de los premios, el galardón fue a recaer en la empresa de seguros ebroker, una compañía que nació hace más de dos décadas en Pravia, en concreto en el año 2000.
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Fue entonces cuando Higinio Iglesias –encargado de recoger el premio y CEO de la empresa– comenzaba a hablar de un concepto como 'cloud computing' o computación en la nube, algo que a día de hoy no solo las empresas tienen intrínseco en su día a día sino la población en general, pero que por aquel entonces «era algo innovador y relevante».
ebroker nació de la necesidad de crear una solución que facilitara la gestión diaria de los corredores de seguros, y que les permitiera conectar de manera más eficaz, eficiente y segura con el ecosistema asegurador. Y lo hizo de la mano de Telecable siendo este su proveedor de servicios en la nube.
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Higinio Iglesias compartió el reconocimiento con Telecable «que con su aportación y apoyo hacen posible que empresas como ebroker, una pequeña pyme, puedan llevar a cabo proyectos de emprendimiento.
La Inteligencia Artificial (IA)está llena de retos y desafíos, y también de riesgos. Así lo aseguró Andrés Pedreño, Catedrático de Economía Aplicada y experto en IA, en la charla que mantuvo con Carmen Reina, Responsable de Data e IA de Telecable y MASORANGE, bajo el título: '¿Por qué la IA es decisiva par el futuro de las empresas?' en el marco de las Jornadas Tecnológicas celebradas en el Palacio de La Riega, en Gijón.
La conversación arrancó con la definición del experto sobre IA, «el intento de la ciencia de reproducir lo que hacen los seres humanos», de tal manera que permite «comunicarnos con las máquinas o automatizar tareas aunque sean complejas». Y aquí, Pedreño advirtió de la «cultura del miedo» sobre la IA que han inculcado a la población en general.
Él, frente a esa creencia de que las máquinas acabarán por sustituir a las personas, apuesta porque los seres humanos se aprovechen de la IA y la utilicen como una herramienta de empoderamiento. Y es consciente, y así lo trasladó, de los riesgos que tiene esta nueva tecnología, no obstante, también en su momento el fuego tenía riesgos «y utilizarlo nos dio numerosas ventajas».
«Estamos obligados a usar la inteligencia artificial. Claro que tiene riesgos, pero debería de crearse una cultura de empoderamiento, y de utilizar esta herramienta con mucha educación», aseguró. Y ese instrumento debe ser desarrollado «con potencia y con seguridad».
Así Andrés Pedreño puso algunos ejemplos en los que la IA juega un papel fundamental, como para conocer cómo funciona el planeta y adoptar así proyectos y medidas frente al cambio climático; para obtener datos a través de la IA sobre enfermedades complejas como un cáncer; para modernizar las ciudades; o en las empresas para multiplicar la producción, entre otros. «Ningún especialista es capaz de leer toda la producción científica que puede haber sobre algún tema. Para eso necesitamos la IA», concluyó.
Asimismo, el experto señaló la necesidad de una regulación del mundo digital, y en concreto de la Inteligencia Artificial, pero eso sí, «una regulación eficiente, hay que conocerlo primero y luego regularlo». «En este contexto Europa no lo tiene fácil», lamentó.
Además, el Catedrático de Economía Aplicada apostó por que los jóvenes utilicen la IA durante sus clases y estudios, ya que el sistema educativo actual es «decimonónico».
Así, él aboga por una clase invertida, de tal manera que los alumnos estudian en su casa los materiales necesarios y personalizados –utilizando herramientas de IA como el ChatGPT–, y el tiempo que se pasa en el aula puede servirles para coordinar el pensamiento crítico y que los alumnos apliquen de manera práctica lo que han aprendido. «Las clases deberían estar llenas de pasión, de debate...las presenciales son para eso», recomendó.
En definitiva, es necesario que los alumnos se familiaricen con la IA, la utilicen sin miedo, que asuman riesgos y que se equivoquen, y que la Inteligencia Artificial «cambie el sistema educativo actual».
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