El Gobierno aprueba el desembarco total de los saudíes de STC en Telefónica

El Consejo de Ministros de este jueves ha dado el 'ok' a la operación, lo que supone que STC se posiciona como segundo accionista mayoritario de Telefónica, solo por detrás del Estado a través de la SEPI (Sociedad Española de Participaciones Industriales). «Esta autorización ha sido precedida de un análisis exhaustivo por parte de las autoridades españolas, con arreglo no solo al cumplimiento de nuestra legislación vigente, sino también a la elementalidad de la ley, tan importantes como asegurar el interés nacional en materia de defensa», indicó el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, tras el Consejo de Ministros.

La firma saudí también celebró la luz verde del Ejecutivo, indicando que, con la adquisición de acciones en activos estratégicos «demostramos nuestra confianza en la capacidad de Telefónica de mantener su posición de liderazgo en el mercado, aprovechando sus infraestructuras, capacidades tecnológicas avanzadas y amplia presencia en Europa y América Latina».

«Como uno de los accionistas mayoritarios de la compañía, mantenemos la confianza en el liderazgo y visión estratégica de Telefónica, con expectativas de trabajar juntos para crear valor para todos los accionistas», expresó en un comunicado Olayan Al-Wetaid, consejero delegado de STC Group.

La operación, que tendrá un coste total en torno a los 2.100 millones de euros, debía pasar por Consejo de Ministros porque la ley española protege a las empresas estratégicas, como Telefónica, de la entrada de capital extranjero, y solo permite comprar el 5% sin autorización previa. Han tardado un año, pero finalmente los saudíes han pasado los controles pertinentes y han logrado su objetivo.

De hecho, el Gobierno decidió su entrada en la operadora al ser sorprendido por la entrada de los saudíes. Poco a poco, la SEPI se fue haciendo con participaciones de Telefónica hasta que han llegado a controlar el 10% de la empresa presidida por José María Álvarez-Pallete por 2.384 millones de euros, convirtiéndose en el máximo accionista de la operadora. Por su parte, CriteriaCaixa (el grupo industrial de la Fundación La Caixa) elevó en julio su peso en la operadora del 4,91% al 9,9% por 1.100 millones de euros, convirtiéndose -hasta la compra del 9,9% de STC- en el segundo accionista.

Debido a esto, por el momento el Gobierno no se plantea ampliar más aún su participación en Telefónica, ya que con la ampliación de acciones de CriteriaCaixa se asegura la 'españolidad' del capital de la operadora.

Por ahora el Gobierno ha nombrado a un consejero, el economista Carlos Ocaña, afín al presidente Pedro Sánchez, pero podrían solicitar un segundo miembro en breve. Y ahora que STC toma el 9,9% de Telefónica también puede pedir su puesto en el consejo.

Desde que STC desembarcó en Telefónica se han ido produciendo encuentros entre directivos de ambas compañías y con el Gobierno. Además de las visitas de Álvarez-Pallete a Riad, donde se encuentra la sede central de STC para conocer los planes de la empresa saudí, a finales de septiembre se produjo una reunión entre el consejero delegado de STC, Olayan Alwetaid, y dos ministros del Gobierno.

El encuentro fue «muy cordial», según aseguraron fuentes gubernamentales tras la reunión, que explicaron que la operadora saudí trasladó su voluntad de entrar como un socio estable, un inversor «a largo plazo» que irá en línea con las inversiones que Telefónica considere necesarias. Los encuentros tuvieron lugar con los ministros de Economía, Carlos Cuerpo, y de Transformación Digital, Óscar López.