Enagás plantea exportar el hidrógeno con tres buques a la semana desde Gijón

Para repartir el hidrógeno, en forma líquida, Enagás calcula que sería necesario fletar entre dos y tres buques semanales. Por ejemplo, tal como recoge el proyecto, de clase multipropósito ('general purpose tanker'). De llegar a buen puerto esta propuesta -presentada a la UE por Enagás junto con la empresa alemana Hydrogenious LOHC Technologies a finales del año pasado-, El Musel podría encarar, con mejores armas, el proceso de transición energética. Sobre todo, ante el posible cierre de las térmicas de Lada (Langreo) y Soto de la Barca (Tineo), ya que el carbón con el que se alimentan las cuatro centrales de la comunidad supone el 23% del tráfico de mercancías de El Musel y el 12% de su facturación (alrededor de siete millones de euros anuales).

Así las cosas, contar con una alternativa es esencial para mantener la competitividad del puerto gijonés, por lo que la noticia fue muy bien recibida por sus responsables. «Toda iniciativa susceptible de generar tráficos portuarios y, por tanto, actividad económica en el entorno de El Musel, no solo es bienvenida, sino que contará siempre con la mayor colaboración por parte de la Autoridad Portuaria de Gijón», señaló ayer un portavoz del organismo que gestiona las instalaciones marítimas. De hecho, «si llega a materializarse, la previsible utilización de la regasificadora, así como que se inscriba dentro del área de energías renovables, supone, sin duda, un valor añadido», remarcó.

El planteamiento de Enagás incluye la posibilidad de movilizar 2.100 millones de euros y, de ellos, 400 en Asturias, para construir una planta de electrólisis abastecida por energía solar y eólica para producir hidrógeno y aprovechar la regasificadora de El Musel -en desuso desde que terminó su construcción en 2012- como almacén. De esta manera, el puerto gijonés se emplearía como punto de salida de este gas hacia Europa, dentro de una red de producción a gran escala en el territorio nacional.

La tecnología elegida para almacenar el gas se basa en los Líquidos Orgánicos Portadores de Hidrógeno (LOHC, por sus siglas en inglés), que permiten realizar el transporte de manera sencilla, del mismo modo que se hace con otros combustibles líquidos. Este proyecto, que aspira a conseguir fondos europeos para convertirse en una realidad, incluye también el desarrollo de una red en España, que emplearía instalaciones con las que ya cuenta Enagás y otras nuevas. Estas últimas estarían, sobre todo, en Asturias, con esos 400 millones de inversión; Castilla y León, donde se destinarían 620 millones; País Vasco (650 millones), Aragón (320) y Baleares (50).

En total, de poder consolidarse, promovería más de 1 GW de generación de energía solar y eólica y más de 0,5 GW de potencia de hidrógeno producido mediante electrólisis. La iniciativa se encuentra en una fase incipiente, según aseguró Enagás, aunque en marzo del año pasado firmó un protocolo de colaboración con el Principado para desarrollar proyectos relacionados con el hidrógeno verde, entre otros gases.