Las empresas del Ibex ganan 50.000 millones por el tirón de banca y energéticas

Desde los números rojos que se dejaron en pleno 2020, las corporaciones que se integran en el índice bursátil más representativo de la economía española acumulan unas ganancias conjuntas de 164.000 millones de euros. Por eso, pueden dar por cerrado aquel episodio, que posteriormente se ha visto salpicado por las consecuencias de la guerra en Ucrania, la inflación y la subida de los tipos de interés.

Los más de 50.000 millones de 2023 (a falta de los resultados anuales de Inditex, que los presentará a mediados de mes) suponen duplicar las ganancias que tuvieron las grandes compañías el año previo al inicio de la crisis del coronavirus.

En términos generales, el beneficio del Ibex-35 cayó un 8,5% el año pasado con respecto al de 2022. Aunque son muchos los matices que definen el resultado. El primero y más importante de todos los condicionantes es que las grandes corporaciones españolas han conseguido liquidar un buen año gracias al impulso de los resultados obtenidos por las entidades financieras y las compañías energéticas. A ambos sectores hay que sumar el de la construcción, también con buenos registros.

En concreto, las grandes entidades españolas cotizadas (Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell, Bankinter y Unicaja) han registrado un beneficio histórico en un contexto que también ha sido poco habitual. Entre todos los grupos acumulan unas ganancias de 26.355 millones de euros, lo que supone casi un 50% más que en el ejercicio anterior. A partir de ahora, prevén crecer al menos de forma vigorosa en este primer semestre de 2024, mientras los tipos sigan en el entorno actual del 4,5%. Porque ha sido la evolución del precio oficial del dinero la que ha ejercido de motor para que las entidades hayan incrementado sus beneficios, su margen de intereses y rentabilidad, su volumen de negocio, así como el dividendo que van a repartir entre sus accionistas gracias a estos resultados.

El otro sector que ha tirado del Ibex-35 ha sido el energético, aunque con menos vigor de lo que lo hizo en 2022, en plena escalada de precios que ya ha tocado a su fin. Entre las tres grandes compañías eléctricas (Iberdrola, Naturgy y Endesa) han cerrado 2023 con un beneficio neto conjunto de 7.500 millones de euros, con un descenso del 11,7%. A lo largo del último año, el resultado ha disminuido básicamente por el descenso del beneficio de Endesa. En el caso de Repsol, sus beneficios se han reducido un 25% hasta los 3.100 millones.

El resultado conjunto del Ibex se ve condicionado en 2023 por cuentas como las de Telefónica, la compañía con mayor peso en el selectivo bursátil. La operadora entró en números rojos, algo que no sucedía desde 2002. Lo ha hecho como consecuencia de varios efectos extraordinarios, como el saneamiento de su negocio en Reino Unido y la provisión para hacer frente al ERE que firmó con los sindicatos para la salida de 3.400 personas. La firma perdió 892 millones de euros, aunque sus ingresos crecieron un 1,6% hasta los 40.652 millones, récord desde 2020.

La evolución de otras grandes magnitudes también ha impactado en el resultado final: ArcelorMittal vio caer su beneficio un 90% por la menor demanda mundial y varios hechos atípicos que influyeron en sus cuentas. Así como por Colonial o Merlin, que cerraron en números rojos.