Secciones
Servicios
Destacamos
El bloqueo de la gran inversión de la planta de reducción directa de mineral de hierro (DRI), sin la que la siderurgia asturiana sufriría una notable pérdida de capacidad productiva, preocupa a los empresarios asturianos porque el problema de los elevados costes eléctricos golpea al ... conjunto del sector industrial. «Esta no es más que otra alerta ante un problema evidente que afecta de forma especial a nuestra industria», señaló la presidenta de la Federación Asturiana de Empresarios (Fade), María Calvo, quien puso el acento en las soluciones que aportan los países de nuestro entorno a las compañías pese a tener precios más altos en el mercado generalista. En este sentido, apuntó que la sostenibilidad «no se limita solo al ámbito medioambiental», al tiempo que subrayó que «la falta de competitividad tendrá consecuencias significativas en la riqueza, el empleo y los servicios públicos». Financiar la transición es «esencial, pero también lo es asegurar la competitividad durante y después de este proceso», añadió.
Calvo valoró el apoyo demostrado al proyecto de Arcelor mediante fondos europeos, pero, a su juicio, es evidente que las empresas «ya no basan sus decisiones de inversión únicamente en estos respaldos», sino que las condiciones de competitividad son el factor «determinante». De manera que las ayudas, como los 450 millones asignados a Arcelor mediante el PERTE de Descarbonización, no serán efectivas si no se garantizan «entornos competitivos y estables». Ante esta situación, Fade insta a las administraciones a que «prioricen este asunto, porque estamos hablando de empleo y soberanía». Debido al riesgo que supone para un sector esencial en Asturias como es al industria, Calvo considera necesario actuar de manera inmediata.
Proyecto «clave»
Por su parte, la consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Nieves Roqueñí, señaló que las empresas «tienen sus tiempos y sus estrategias, y hay que ser muy respetuosos con ellas». Recordó que el ministro de Industria, Jordi Hereu, ha calificado el plan verde de Arcelor para Asturias como «clave» para el Ejecutivo central, al igual que lo es para el Principado, por lo que es vital «seguir apoyándolo desde todos los frentes». Así las cosas, la consejera hizo un llamamiento a la «paciencia» porque este tipo de proyectos son «de maduración lenta». Además, «hay que pensar que la ayuda sigue existiendo para la empresa y que tendrá que tomar una decisión tarde o temprano» sobre su aceptación o no para materializar la inversión.
También se pronunció sobre la parálisis del plan de descarbonización la portavoz del grupo socialista en la Junta General, Dolores Carcedo, quien manifestó su coincidencia con la postura de UGT-FICA Asturias de exigir a Arcelor «el desarrollo de las inversiones», tras reunirse con representantes de esta federación y de los comités de empresa de Arcelor. «Esperamos que la empresa aborde los compromisos para desarrollar los proyectos para la descarbonización en Asturias y que el trabajo intenso y la interlocución permanente al máximo nivel del Principado con el Ministerio de Industria y con la dirección de la empresa faciliten el desarrollo de esas inversiones cuanto antes», indicó Carcerdo. Asimismo, manifestó su confianza en que la evolución del mercado en los próximos meses «frene las previsiones de la empresa de parar de manera coyuntural un horno alto y que, en caso de que se dé ese escenario, se genere el menor impacto posible».
Mientras que el presidente del PP regional, Álvaro Queipo, declaró que su partido ya alertó hace tiempo de la necesidad de un estatuto para las empresas electrointensivas que asegurase un precio estable y reducido de la electricidad. «Fuimos muy combativos, pero Pedro Sánchez prefirió pactar con los independentistas para que ese estatuto fuera generoso con las comunidades autónomas donde gobernaban», y, como resultado, «España no tiene un precio competitivo de la electricidad, nuestras empresas no pueden acceder a un precio reducido y estable de la luz, y, por tanto, proyectos como el de Arcelor, de momento, se quedan en el aire y parece que se pospone o se paraliza», subrayó.
Para la diputada autonómica de Podemos, Covadonga Tomé, que ayer se reunió con miembros de los comités de empresa, es fundamental que una empresa que reciba ayudas públicas «tenga un compromiso de permanencia y de protección absoluta a cualquier puesto de trabajo». «No puede ser que Arcelor, una vez más, sea el niño mimado del Gobierno de Asturias, que le otorga 36 millones de dinero público cuando el señor Mittal está hablando de parar un horno alto», añadió.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.