CriteriaCaixa eleva su poder en Telefónica y lo iguala con el del Estado

CriteriaCaixa había realizado su última operación de inversión en Telefónica el pasado mes de abril, cuando alcanzó un 5,01% de su capital, tal y como comunicó oportunamente a la CNMV, si bien dicho porcentaje pasó a ser el 5,08% después de la reciente reducción de capital de la operadora de telecomunicaciones.

En el trasfondo de esta operación se encuentra un deseo de incrementar ese poder a costa de que CaixaBank, el banco que Criteria controla en casi un tercio de su accionariado, lo fuera perdiendo. De hecho, la entidad financiera ha disminuido poco a poco ese poder con las ventas realizadas en los últimos meses hasta salir de la corporación. CriteriaCaixa quiere tomar desde hace meses un papel relevante para aumentar sus posiciones en empresas estratégicas españolas, como Telefónica o Naturgy, en paralelo al Gobierno. El 'holding' presidido por Isidro Fainé, quien también es consejero y vicepresidente de Telefónica, quiere garantizar la españolidad de la compañía así como servir de dique de contención para evitar la injerencia de otros inversores mundiales como ha ocurrido tras la entrada de los saudíes de STC. En este sentido, Fainé ha tomado las riendas y su fundación irá asumiendo ese papel.

Este nuevo incremento de participación se ajusta a la política de inversión de CriteriaCaixa, caracterizada por una gestión eficiente y prudente de su portafolio, focalizado en compañías con una atractiva política de dividendos, como Telefónica. Para CriteriaCaixa, primer holding inversor en España, la participación en Telefónica tiene carácter estratégico y de largo plazo. En este sentido, CriteriaCaixa considera que su inversión contribuirá a dotar de mayor estabilidad accionarial a la operadora, compañía esencial tanto para el país como para el sector a nivel internacional.

El movimiento se produce apenas una semana después de que CriteriaCaixa anunciara su intención de tomar un papel protagonista en el panorama empresarial español al estimar un incremento sustancial de sus inversiones en compañías que le llevarán a aglutinar participaciones corporativas por un valor de unos 40.000 millones de euros frente a los 27.000 millones que posee en estos momentos. El presidente del 'holding' industrial de 'la Caixa', Isidro Fainé, presentaba en Barcelona estos objetivos en el marco del plan estratégico del grupo 2025-2030 con el que la corporación aspira a ser un «agente estabilizador» de la economía española.

El grupo ya anticipó en su momento que aunque coincida con los intereses que ha materializado el Gobierno a través de la SEPI (con su 10%), desde el 'holding' apuntan a que el diálogo con Moncloa es el «habitual» pero cada uno está marcando su estrategia que es independiente de la estatal.

Los movimientos han sido continuos en torno al accionariado de Telefónica en las últimas semanas. Aunque el Estado se convirtió el 20 de mayo en el primer accionista de Telefónica con un 10% de la operadora CriteriaCaixa ya anticipó en ese momento que estaba preparando la compra de títulos de Telefónica hasta controlar también un 10%. Es decir, duplicaría su poder e igualaría al de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales), desde el 5% que ostenta en la actualidad.

Hacía muchos años que CriteriaCaixa no realizaba tantos movimientos corporativos como los que ha protagonizado en el último mes de la mano de su presidente, Isidro Fainé. El empresario sabe moverse ante contextos inesperados. Y el asalto de firmas extranjeras sobre corporaciones estratégicas para la economía española le ha servido para ejercer de protagonista con un papel de moderador con implicaciones en estamentos no solo empresariales sino políticos.

El último movimiento lo ha ejecutado en ACS, la constructora presidida por Florentino Pérez. Su entrada se explica por el deseo de de seleccionar «empresas líderes en sectores altamente atractivos, con capacidad de crecimiento y generación de valor». Ha sido la última guinda tras Inmobiliaria Colonial, Puig, Cellnex... O Telefónica.

De todos los movimientos que CriteriaCaixa realizará en los próximos meses, buena parte del foco se encuentra sobre Naturgy, después del fracaso de la negociación con la emiratí TAQA para adquirir el 40% de la energética que está en manos de los fondos CVC y GIP. Tras la ruptura anunciada la semana pasada, el grupo presidido por Isidro Fainé está buscando otros socios para acometer esa operación. Además, lo harán lo más pronto posible y siempre junto a otra empresa, nunca en solitario.