Arcelor y los sindicatos acuerdan las medidas del ERE para dar salida a 124 trabajadores

Los primeros lo harán «cuando haya la seguridad jurídica» par la aplicación de la medida, según la empresa, aunque como fecha máxima se establece el 30 de junio; mientras que en el caso de los segundos podrá extenderse, como tope, hasta el 1 de octubre. La empresa garantiza que percibirán hasta el 80% de las retribuciones ordinarias fijas y el acceso a las ayudas previas con un máximo de cuatro años a partir de su obtención hasta la edad de jubilación, sin que afecten a la pensión ordinaria. Además, se aseguran las mismas coberturas de los seguros que se incluyen en el contrato relevo, herramienta habitual en años anteriores que, en esta ocasión, Arcelor ha rechazado utilizar, ya que el plan de descarbonización planteado para las fábricas de Gijón y Avilés conllevará una reducción de la plantilla dado el mayor grado de automatización y, por tanto, la necesidad de menos mano de obra.

La siderúrgica argumentó en un comunicado que este despido colectivo se adopta «ante la necesidad de amortizar un número determinado de puestos de trabajo debido al deterioro de la actividad de la compañía en los últimos años, tanto en ingresos como en volumen de producción». En este contexto y en virtud del análisis de mercado llevado a cabo, apuntó, «se hace necesario adoptar medidas para incrementar la productividad y asegurar la viabilidad y competitividad» de Arcelor en España, entre las que se encuentra este ERE. Aunque afecta a 124 trabajadores del denominado Clúster Asturias –111 de ellos, en la región y el resto entre Sagunto (Valencia), Echévarri (Vizcaya) y Lesaca (Navarra)–, se amortizan 131 puestos de trabajo, por lo que es de esperar que haya reorganización de funciones entre la plantilla.

Entre las medidas acordadas ayer con el voto a favor de la mayoría sindical, formada por UGT y USO, –CC OO, CSI y el sindicato vasco ELA rechazaron el contenido del ajuste–, se especifica que, en el caso de que algún trabajador no tuviera a los 65 los años cotizados suficientes para tener derecho al 100% de la pensión, este periodo se podría prorrogar y seguir en ayudas previas hasta que lo alcance.

Asimismo, la multinacional había accedido a que los trabajadores pudieran optar por un ERE de extinción con ayudas previas o por acogerse al contrato de relevo manufacturero, modalidad por la que optaron 49 empleados, de los cuales 40 pertenecen a las planta asturianas, cuya fecha límite de salida también es el 30 de junio. Gracias a ello, se incorporarán a la empresa otras tantas personas con contrato indefinido, aunque no todas serán eventuales que trabajan ahora en la compañía.

UGT aprovechó para trasladar a la dirección que «es necesario seguir avanzando en las inversiones vinculadas a la descarbonización» para poder garantizar capacidades productivas y empleo, así como el futuro de la siderurgia en España. Por su parte, CC OO señaló que con este ERE «se constata la vergonzosa venta del contrato de relevo, reducido en esta ocasión a la mínima expresión y el nacimiento de esta nueva alternativa que solo traerá precariedad, empeoramiento de las condiciones de trabajo y destrucción de empleo». En sentido similar se pronunció CSI, que acusó a los sindicatos que votaron sí al acuerdo de «firmar la rendición, dando así carpetazo definitivo al contrato de relevo en las plantas asturianas».