Baterías de hidrógeno verde de El Entrego al mundo

Con la idea de «crear un hardware capaz de aglutinar todas las fases del hidrógeno», comenzaron desarrollando un primer prototipo de batería de hidrógeno verde (que se asimila a una batería de litio convencional). En estos inicios contaron con el apoyo del Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI), para la puesta en marcha y el plan de negocio, y también tuvieron respaldo económico del antiguo Instituto de Desarrollo Económico del Principado (IDEPA).

El prototipo lo acabaron en 2021 y desde entonces fue evolucionando hacia un producto final comercial que, como se decía, va dirigido a ese tipo de clientes que precisan de seguridad energética, pero también a los que «necesitan sacar el máximo rendimiento al potencial de su fuente renovable» y a aquellos que, muy alineados con los objetivos de desarrollo sostenible, quieran innovar y ser pioneros en la transición energética», explica Ocando.

Han cerrado cuatro ventas de su producto: dos en España, una en Portugal y otra en Estonia. Lo han vendido a una universidad y un centro tecnológico, interesados en «evaluar sistemas inteligentes que combinan distintas fuentes de energía para el desarrollo de ciudades sostenibles»; a una pyme que trabaja en un proyecto de integración de energías y a «una empresa estona que desarrolla módulos de habitabilidad -de oficinas, de viviendas, de hoteles- transportables y que puedan estar desconectados tanto de fuentes energéticas convencionales como generar su propia agua».

La empresa ha dado un salto más y está desarrollando también «soluciones 'llave en mano'» que aglutinan procesos de ingeniería, desarrollo de producto y su instalación. De hecho, ya han cerrado tres proyectos en España para instituciones de investigación y otro en Italia.

Con este incremento de la internacionalización -que comenzó en 2022-, H2Vector espera establecer relaciones a largo plazo y, en el terreno económico, duplicar, «como mínimo», su facturación de 2023, que se situó en torno a los 200.000 euros. Porque el objetivo está en alcanzar el millón de euros este año. «Por nuestro modelo de negocio podemos dar una solución extrapolable a cualquier del mundo». También crecerá en empleo, con dos incorporaciones más.

La start-up -Premio Radar a la Mejor Empresa de Base Tecnológica (2021) y galardonada también con el Ances Open Innovation entre otras distinciones-aprecia un «interés muy grande en el hidrógeno verde. Vemos que hay muchas ganas de hacer y desarrollar aplicaciones en la cadena del hidrógeno», aunque sea aún un «mercado que se está formando». «Nosotros hemos apostado por distintas verticales y contamos con experiencia en todos los campos de la cadena de valor del hidrógeno verde», apunta Miguelangel Ocando

H2Vector participa en el Tren bimodo (el ferrocarril propulsado por hidrógeno que lidera Renfe dentro del PERTE de la cadena de valor del hidrógeno verde), para el que está desarrollando un software que permite simular y predecir toda la cadena de valor del hidrógeno: desde su producción hasta su carga en el tren. También trabaja en el protocolo de carga entre la estación de descarga del hidrógeno y el ferrocarril. Y, en Asturias, participa en el H2 Hub que lidera ArcelorMittal, evaluando líquidos orgánicos protadores de hidrógeno (LOHC) y la mezcla de hidrógeno verde con combustibles tradicionales.