Sabadell se abre a una fusión ante la presión de los inversores

La concentración bancaria parece un proceso que no tiene fin y que en 2020 seguirá marcando la agenda de gran parte de los actores del sector, con protagonistas grandes, llamados a 'comerse' a los pequeños', y pequeños que se resisten a perder su independencia, como Liberbank, y exploran fusiones entre iguales. En este contexto, Josep Oliu, presidente de Banco Sabadell, que en Asturias opera bajo la marca SabadellHerrero, se abrió ayer a que su entidad sea protagonista de alguna de esas integraciones.

Según explicó en un acto en la Cámara de Comercio de Sabadell, los inversores continúan su presión para que las entidades sigan reduciendo los costes y haya más concentraciones. «Quizá sí, ya veremos», apuntó sobre la posibilidad de que Banco Sabadell participe en alguno de eso procesos. Mucho se lleva hablando de que su pareja de baile podría ser Bankia, aunque no es la única posibilidad, y el banco participado por el Estado podría terminar también en una integración con otra entidad, como BBVA.

Mientras, hay otras candidatas entre las de tamaño medio, tanto para una unión con Sabadell como para asociarse entre ellas. Destacan en este grupo Liberbank, Unicaja y Abanca, tras los fallidos intentos de fusión del año pasado, y también Ibercaja.

Por otro lado, Oliu también advirtió ayer de que existen «dudas» en los mercados sobre la evolución de la economía con el nuevo Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos. En este sentido, ha sugerido que, pese a estar dentro de los límites del déficit europeo, habría que apostar por «políticas austeras y coherentes con lo que serían las necesidades a medio plazo», y ha recordado que el Fondo Monetario Internacional ha rebajado dos décimas, hasta el 1,6%, las previsiones de crecimiento de España.