Fade aplaude la fusión con Unicaja porque permite a Liberbank ganar músculo

Cada uno barrió para casa y el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, además de calificar como «altamente positiva la fusión», presumió de que «Andalucía va a contar con una entidad más fuerte, más solvente y más rentable, manteniendo el ADN andaluz». Según González de Lara, «la unión se beneficiará de un mejor acceso al mercado de capitales y deuda».

A través de un comunicado emitido ayer, el empresariado asturiano quiso felicitar al consejero delegado de Liberbank, Manuel Fernández, «por la negociación que ha realizado». Unos meses de conversaciones, y un intento fallido hace dos años, pero de los que Fade opta por quedarse con «la solución legal encontrada, que parece ser bastante rápida y relativamente sencilla, y contribuirá a su culminación final sin mayor problema». Lejos de suponer que esta fusión deje a la entidad de origen asturiano empequeñecida, la patronal cree que «permitirá a Liberbank ganar músculo para encarar los muchos y complejos retos a los que este sector ya se está enfrentando en el presente y deberá profundizar en el futuro».

Desde la patronal andaluza, González de Lara, cree que «la fusión va a significar una magnífica complementariedad de la cultura entre ambas entidades para asumir nuevos retos, como es la mejora de la eficiencia de sus servicios financieros y la mejora de las sinergias en sus ingresos». Asimismo destaca «la importancia de la presencia de ambas entidades en zonas rurales, que va a permitir más capacidad financiera de sus fundaciones para sus correspondientes obras sociales». Por su parte, Fade concluye que ahora se colocarán en «una inmejorable posición para seguir ganando competitividad, con una ratio de solvencia de las más altas entre las entidades bancarias españolas y teniendo detrás una sólida base accionarial».

Según reconocieron ayer los máximos dirigentes de Liberbank y Unicaja, todavía no está claro cómo afectará esta operación a las plantillas. Pero lo hará, a juzgar por lo que dejaron entrever, a la espera de un análisis más exhaustivo sobre los solapamientos entre ambas entidades que se puedieran derivar de la fusión.

La situación parece que será bien distinta en función de si hablamos de los lugares donde Liberbank y Unicaja son hegemónicos o si se atiende a los servicios centrales, que será los que se vean perjudicados ante este nuevos escenario. De hecho, el secretario general de CC OO-COMFIA, Justo Ruiz, aunque está a la espera de la consecuencias de la fusión, cree que no tendrá afectación en el empleo en Asturias. «Son dos empresas que aquí no tienen solapamientos», señaló ayer, y añadió que «cuanto más solvente sea la empresa y mejor esté, esto supondrá que se disminuyen los riesgos».

Por su parte, el secretario general de UGT en Asturias, Javier Fernández Lanero, recordó que «siempre que hubo fusiones y alguien quiere volverse más competitivo, lo hace a costa de reducir plantillas». Por ello, espera que, en esta ocasión, la operación financiera «no conlleve pérdida de derechos laborales ni de condiciones económicas de la plantilla».