Amparo Estrada
Jueves, 23 de abril 2015, 13:56
El presidente de Caixabank, Isidro Fainé, recalcó en la Junta General de Accionistas que el banco no sólo debe ganar dinero, "que es importante", sino también mostrar "responsabilidad social". La obra social es una de las áreas más queridas para Fainé; por octavo año se destinarán 500 millones de euros a la misma.
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Pero Fainé fue más allá y recalcó la importancia para la reputación de la entidad de colaborar con la sociedad no sólo mediante la obra social sino mediante su propia actividad bancaria, un mensaje en el que también se han embarcado otros responsables bancarios, como la presidenta del Banco Santander, Ana Botín. "Si la sociedad no percibe que hacemos una función de alto valor y la hacemos bien, será muy difícil alcanzar una rentabilidad sostenible y recurrente que supere el coste del capital".
Además, anunció que el compromiso en mantener en 2015 un esquema similar de retribución al accionista para lo que destinarán este año 900 millones de euros.
Por otra parte, el presidente de Caixabank calificó a la entidad como "el gran supermercado financiero de España. Desde el más pobre al más rico encontrará su producto".
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