

Secciones
Servicios
Destacamos
Pesimismo y desconfianza. Son las dos palabras claves de la situación presente y a un año vista de la economía asturiana que arroja el Económetro ... 2022. El informe que elabora el Colegio de Economistas de Asturias, junto a la Universidad de Oviedo, con el apoyo de Caja Rural de Asturias y PwC, refleja un freno a la expectativas de mejora que el colectivo constataba a finales del año pasado, y las aleja de la percepción de optimismo y confianza de 2019, primer año del análisis. La negatividad, además, se extiende tanto a nivel general, como a la situación de los propios hogares asturianos y a la capacidad de generar empleo.
La encuesta fue realizada por 291 economistas entre el 3 de marzo y el 18 de abril, pero «si la hiciéramos hoy en día serían peor los datos», afirmó Santiago Álvarez, coordinador técnico del Económetro y vocal del colegio. Fue él, junto a decano de los economistas, Abel Fernández, quienes pusieron cifras a esa desesperanza. Así la confianza cayó casi 13 puntos en comparación con el año pasado: el índice de confianza se sitúa en -25,59 puntos, en una escala de -100 a 100, frente al -12,43 de 2021. De los cuatro indicadores que se valoran para calcular este índice, «tres de ellos empeoran, el único que mejora es el de expectativas de empleo en Asturias», apuntó Álvarez. En 2021 las previsiones de empleo se situaban en casi un -36% y en esta ocasión se sitúa en el -28,3%.
En cuanto a la situación económica personal, casi el 60% de los encuestados cree que están mejor que hace un año, sin embargo, menos de la mitad considera que estará igual o mejor dentro de 12 meses. Más pesimistas son con la situación de Asturias, de hecho, el 63,6% considera que ha empeorado con respecto a hace un año y lo que es más desolador, un 76,3% cree que dentro de un año será todavía peor.
Uno de los valores más 'optimistas' que se desprenden del informe, aún siendo negativo es la percepción sobre el empleo. Casi un 64% de los economistas asturianos considera que el desempleo aumentará en el próximo año, seis puntos por debajo de la apreciación de la pasada edición del informe. Más complicada está la perspectiva en cuanto al ahorro: sólo un 47,4% cree posible ahorrar en los próximos meses, un dato muy inferior al 57,2% que veía posibilidades de hacerlo en 2021 e incluso, más negativo que el presentado en plena pandemia, en 2020, cuando la mitad de apostaba por lograrlo.
En cuanto a los principales factores de competitividad de la economía asturiana, el 88% de los economistas considera que el precio de la energía es uno de los tres principales, le siguen la presión fiscal, los costes laborales y las infraestructuras y comunicaciones que en 2021 ocupaban el tercer lugar.
El 81,8% de los profesionales considera que «hemos entrado en un periodo de inflación prolongada que piensan que obligará a realizar cambios en la política económica», señaló Álvarez. Sólo el 10,7% ve una situación transitoria y únicamente un 7,5% piensa que la inflación será moderada.
Pesimista es también la visión que tienen sobre la implantación del registro retributivo de plantilla y la obligatoriedad del plan de igualdad. «Un 78,7% es pesimista y considera que va a ser una carga administrativa para las empresas» en lugar de medidas para impulsar un cambio real. En la misma línea se opina sobre la subida del salario mínimo interprofesional: un 67% cree que tendrá efectos sobre la creación de empleo, «pero solo el 29,6% lo afirma con seguridad».
Más datos. El 80,8% creen que lo más oportuno sería una bajada de impuestos «para reactivar el consumo y la inversión» y, respecto a los autónomos, más de la mitad ven que la subida de cuotas implicará una menor contratación.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.