
Arcelor ha comenzado a producir en su factoría de Gijón chapas gruesas de acero con bajas emisiones de carbono con pesos de hasta 18 toneladas por unidad. Así, se convierte en la primera compañía siderúrgica capaz de fabricar piezas de este producto pionero de tales dimensiones en Europa, según explicó ayer la multinacional. La chapa gruesa de acero XCarb –reciclado y producido de forma renovable– se fabrica a partir de desbastes producidos por ArcelorMittal Industeel, en Bélgica, en un horno de arco eléctrico utilizando casi exclusivamente chatarra reciclada y electricidad 100% renovable. Estos desbastes se laminan luego en el tren de chapa de Arcelor de la planta gijonesa. De este modo, se consigue que el producto final tenga una significativa reducción de las emisiones de CO2, de en torno a un 60% en comparación con las chapas de acero producidas mediante el proceso siderúrgico convencional (ruta de horno alto).
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Las chapas gruesas de acero de 18 toneladas se utilizan habitualmente en grandes proyectos de infraestructuras; por ejemplo, en los perfiles soldados y vigas cajón empleadas en puentes de carretera o de ferrocarril. El uso de esta nueva chapa gruesa en proyectos de ingeniería civil permite a los clientes de Arcelor «reducir de manera demostrable sus emisiones de alcance 3 (emisiones vinculadas a la cadena de suministro), contribuyendo así a reducir la huella de carbono asociada a los proyectos de infraestructuras», apunta la siderúrgica. «Nuestros equipos han llevado a cabo sustanciales esfuerzos para poder ofrecer al mercado este producto que, como sabemos, da respuesta a una creciente demanda por parte de nuestros clientes de acero con bajas emisiones de CO2, que contribuya a reducir la huella de carbono asociada a complejos proyectos de ingeniería civil, señaló el director comercial de Chapa Gruesa de ArcelorMittal en Europa, Denis Parein.
Arcelor obtendrá unos beneficios netos de 1.449 millones de dólares (1.287 millones de euros) en el segundo trimestre, un 63,1% menos que en el mismo periodo del pasado año, según las previsiones del consenso de analistas externos. Además, este grupo de expertos apunta un resultado bruto de explotación (ebitda) de 2.493 millones de dólares (2.215 millones de euros) entre abril y junio, un 51,7% menos en la comparativa interanual. Asimismo, los analistas prevén que la multinacional siderúrgica conseguirá un beneficio por acción de 1,69 dólares (1,5 euros), un 60,2% menos.
Asimismo, anunció que, antes del final de este año, se dispondrá de una Declaración Ambiental de Producto (EPD) conforme a la norma europea EN 15804, verificada por una entidad independiente, aplicable a la chapa gruesa de acero XCarb reciclado y producido de forma renovable. ArcelorMittal Europa se ha fijado como objetivo reducir sus emisiones de CO2 en un 35% con el horizonte de 2030 y alcanzar la neutralidad de carbono en 2050.
Precisamente, está previsto que buena parte de la producción asturiana se convertirá en XCarb cuando se lleve a cabo el proyecto de descarbonización planteado para las fábricas asturianas y para la acería eléctrica de Sestao. Iniciativas que aún deben obtener el visto bueno del comité de inversiones del grupo.
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