Arcelor y AZSA servirán de respaldo al sistema eléctrico

El nuevo mecanismo se ha diseñado en un tiempo récord -se anunció a finales de septiembre-, lo que ha complicado su desarrollo e incluso que las compañías pudieran presentarse. Más aún cuando ahora deben hacerlo de la mano de sus comercializadoras. De hecho, solo se han adjudicado 497 MW de potencia, frente a los 2.700 que planteaba REE, lo que supone un 18,4%.

Las condiciones y la remuneración que se podía alcanzar han reducido la cifra de empresas que están dispuestas a parar parte su actividad para servir de respaldo al sistema. Las compañías adjudicatarias, como Arcelor y AZSA, serán retribuidas con 69,97 euros por cada MW asignado y hora, por su disponibilidad en el tiempo previamente establecido para la prestación del servicio (2.714 horas). Las grandes electrointensivas consideraban justo que se llegara al menos a 100 euros.

El mecanismo comenzará a funcionar prácticamente de inmediato, el próximo 1 de noviembre, y estará activo en las actuales condiciones hasta el 31 de octubre de 2023.