El gasto social se lleva uno de cada tres euros de la nueva concertación

Fue una negociación larga -de cuatro meses desde que se inició oficialmente y de siete de forma oficiosa- y difícil, según coinciden todas las partes, pero que llegó ayer a buen puerto con la firma del Acuerdo para la Competitividad Económica y Sostenibilidad Social (ACESS). Este es el nombre del pacto de concertación social para los próximos cuatro años que ayer rubricaron el Gobierno del Principado, la Federación Asturiana de Empresarios (Fade) y los sindicatos UGT y CC OO, un documento que compromete un gasto de casi 1.743 millones de euros de aquí a 2019, a razón de 435 al año. A pesar de que los firmantes pusieron el énfasis en su carácter innovador, su apuesta por el tejido productivo y la sectorialización -se centra en áreas con potencial de crecimiento y capacidad de arrastre-, el gasto social se lleva la partida más importante. A él se destinará algo más de un euro de cada tres. De hecho, de las cuatro grandes áreas en las que se divide el acuerdo, el capítulo dedicado a innovación y sostenibilidad social tiene reservados cerca de 619 millones, un 35,5% del total. Este bloque, destinado a mantener la protección social y la sostenibilidad de los servicios públicos esenciales, cuenta como novedad con la incorporación de la patronal a los apartados en los que se abordarán la sanidad y la educación. Dentro de esta área, destaca el subapartado de salario social e inclusión social que, con 350 millones, supone el 20% del total de la concertación social. También sobresalen los 180 millones dedicados a la dependencia y los 48 que van a inversiones en red y equipamientos sanitarios.

El segundo capítulo que más inversión se lleva en el acuerdo es el de desarrollo territorial sostenible, con casi 454 millones de euros, el 26% del total, en el que destacan las infraestructuras viarias (167 millones) y los planes e infraestructuras ambientales y territoriales de interés general (160). Se trata de actuaciones de carácter inversor que van desde la apuesta por el área central metropolitana a la ZALIA.

Para el impulso sectorial y la mejora de la competitividad se reservan 435 millones (el 25%), de los que 296 corresponden al Plan de Ciencia Tecnología e Innovación del Principado (PCTI) y 60 al impulso sectorial, mientras que la cuarta pata del acuerdo es la inserción laboral y mejora de la empleabilidad, a la que se destinará el 13,5% del total, 235 millones, con partidas para la mejora de la empleabilidad (118 millones) y para políticas activas de empleo de colectivos desfavorecidos (107 millones).

«Ejemplo de negociación»

Para el presidente del Principado, Javier Fernández, los compromisos consensuados no sellan las diferencias, pero son «un buen ejemplo» de lo que se puede llegar a hacer «cuando se unen la capacidad y la voluntad real, no fingida», en un momento que reconoció como complicado, «marcado a fuego por la carencia de recursos económicos», «las evidentes angosturas presupuestarias» y «la incertidumbre», pero también por una época que definió de «simulacros y postureos» que convierten las negociaciones en «una frívola farsa», en referencia a la nueva convocatoria electoral. Además, como los representantes de Fade, UGT y CC OO, destacó que el acuerdo no es «más de lo mismo» y supone «una gran apuesta por la innovación socioeconómica».

El presidente de Fade, Pedro Luis Fernández, por su parte, también subrayó que se trata de «un documento innovador, que puede ayudar a Asturias» y que «piensa en el crecimiento, intentando no dejar a nadie en la cuneta». Mientras, desde los sindicatos, el aún secretario general de UGT, Justo Rodríguez Braga, destacó el equilibrio que presenta el acuerdo «entre inversión productiva e inversión social», de la que dijo que «no se puede medir en miles de euros, sino en necesidades» y también recordó que él no podrá desarrollarlo, ya que este fin de semana dejará de ser secretario general del sindicato en Asturias después de 16 años. Su homólogo en CC OO, Antonio Pino, señaló que el documento es «adecuado y positivo» para la situación de crisis actual y, aunque es consciente de que «no va a resolver todos los problemas», cree que «los aliviará».