photocall3000 | manu pecino
Domingo, 4 de junio 2017, 22:23
Con 17 puntos de diferencia llegaba Viñales a Italia el pasado viernes, primer día del GP transalpinoy con 26 se marchó el domingo por la tarde. Es decir, en sólo seis carreras, Maverick ha conseguido amasar una ventaja de un GP completo.
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En esta media docena de carreras hemos visto todo tipo de versiones de Viñales. El arrollador de los primeros GGPP, que metió el miedo en el cuerpo a todos sus rivales; el humano que se equivocó en Texas yéndose al suelo o el paciente de Jerez, dónde las condiciones técnicas le obligaron a nadar y guardar la ropa. En Mugello Viñales mostró otra vertiente: la del piloto capaz de dominar sus instintos en aras de intereses futuros, algo que generalmente le cuesta bastante a los pilotos.
Con la carrera en sus momentos finales, y rodando a poco más de un segundo por detrás de Andrea Dovizioso y su Ducati, el instinto de ganador le llevó a plantearse un ataque final sobre el piloto italiano. Ganar en un Mugello teñido de amarillo por los fans de Valentino Rossi era así como un plato lleno para alguien que lleva sin comer días.
Claro que pensé en intentarlo, decía Maverick tras la carrera. Cuando faltaban seis vueltas he adelantado a Petrucci y he intentado ir a por Dovi. He hecho varias vueltas a tope, pero de repente he pensado que salir de aquí con 20 puntos más, teniendo a Valentino y a Marc detrás, era bueno para el campeonatoy el Viñales sensato se impuso al carrerista. Bueno, no está muy claro si fue por sensatez o por otra razón por la que decidió asegurar en lugar de arriesgar. Cuando estaba en plena caza de Dovizioso me he dicho a mí mismo: cómo pase algo, es mejor que ni regrese al box, así que he decidido quedarme segundo.
Sea por lo que fuere, el hecho es que Viñales se está erigiendo en el piloto más regular. Con Jorge Lorenzo perdido intentando entender cómo pilotar su Ducati, Valentino Rossi dando muestras de que cada vez le cuesta más, y a un Marc Márquez que tiene su mayor rival en su moto y no en otros pilotos, poco a poco Maverick está acumulando ventaja.
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Con un tercio del campeonato ya celebrado, es momento de empezar a correr con la cabeza, porque los error comienza a pesar cada vez más y Viñales, uno de los pilotos más jóvenes de la categoría, está demostrando tener la cabeza muy bien amueblada. El próximo fin de semana en el Circuit de Catalunya, un nuevo capítulo.
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