Márquez abre hueco en Indianápolis

Si la tónica del viernes en Indianápolis había sido la igualdad entre Jorge Lorenzo y Marc Márquez, con una ligera ventaja para el mallorquín, el sábado la situación viró en el sentido contrario. Ya en el primer libre Márquez comenzó a marcar una pequeña distancia, que se confirmó y aumentó en el últimos entrenamiento previo al oficial, ese que se disputa casi a la misma hora de la carrera y que suele dar las pistas más fiables sobre lo que puede intuirse de cara al domingo. Y ahí Márquez dio un golpe sobre la mesa. El catalán se instaló en unos tiempos a los que el resto de rivales no fueron capaces de llegar, casi siempre por debajo del minuto y treinta tres segundos. Un ritmo que confirmó lo que la previa decía de la prueba estadounidense -que podría estar ante su última edición- antes de que el viernes Lorenzo se empeñase en sumar su nombre al de favoritos al triunfo: Márquez solo sabe ganar en Estados Unidos desde que debutó en MotoGP, una espectacular estadística que con lo visto el sábado va camino de incrementarse. «El último libre ha salido muy bien y estoy contento», confirmó el piloto.

El buen sábado del campeón de los dos últimos años quedó confirmado con su quinta pole de la temporada, en un momento en el que ha recuperado el buen entendimiento con su Honda. Mantiene algunos problemas de principio de año, eso sí, aunque los ha conseguido compensar con algunas mejoras en otros puntos. «Las seis décimas de ventaja del entrenamiento oficial no son reales, quizás una o dos de ventaja de ritmo sí que tengo, y eso nunca viene mal. Esa diferencia era favorable para Lorenzo el viernes y hemos conseguido darle la vuelta. En principio, a día de hoy, Jorge es el rival más duro y habrá que estar muy atento a él para la carrera».

Justo al lado de Márquez saldrá el domingo su compañero de equipo, Dani Pedrosa, al que se le asigna un potencial papel relevante en lo más importante en MotoGP: la pelea por el título. «He tenido que trabajar mucho con los neumáticos porque mi ritmo es algo peor que el de Márquez y Lorenzo, así que había que probar cosas», explicó Pedrosa nada más bajarse de la moto. «He dado tres vueltas buenas y podía haber rebajado incluso mi tiempo, pero he cometido un error en una de mis vueltas y ya no he tenido oportunidad de mejorar. Estoy contento con esta primera fila y seguiremos trabajando de cara a la carrera para rebajar esas décimas que nos faltan».

Todo lo que Pedrosa pueda entrometerse en esta batalla podrá suponer una variación en la suma y resta de puntos en un punto en el que parecía que solo iban a jugar Márquez, Lorenzo y el líder de la general, Valentino Rossi. Y es sin duda Rossi el que en peor situación parte para la carrera, con Lorenzo con el segundo mejor ritmo de la parrilla y que logró el tercer mejor crono en el entrenamiento oficial. «El viernes estaba yo delante y ahora no hemos podido mantener la ventaja que teníamos», comentó el mallorquín, no muy satisfecho con cómo habían ido las cosas.

En cuanto a Rossi, sólo pudo ser octavo, una posición con cierto toque de curiosidad estadística: desde ahí logró tres de sus últimos cuatro triunfos, los de Phillip Island en 2014 y los de Catar y Argentina este año. Aunque las sensaciones de Rossi no fueron las mejores, lo cierto es que consiguió mejorarlas a lo largo de la última jornada de entrenamientos. Experto en sacar conejos de la chistera a última hora, el líder podría contar con un factor de última hora a su favor: la previsión meteorológica habla de inestabilidad el domingo y bajada de temperaturas. Y eso puede cambiar hacia cualquier lado lo visto en los días previos.

La segunda de Rins

La clase intermedia dejó unas cuantas cuestiones interesantes en un momento en el que el campeonato parece completamente decidido. La primera, los problemas de Johann Zarco, un piloto que se está caracterizando en 2015 por su regularidad pero que en Indianápolis nunca se le vio cómodo. El francés, líder de la general con 65 puntos de ventaja sobre el segundo, ya anticipó que este no es uno de esos circuitos en los que disfrute pilotando, una tónica que no ha cambiado ni estando en el mejor momento de su carrera deportiva. Zarco sufrió un problema técnico en el primer libre del sábado la rotura de un fusible- que le restó unos preciosos minutos en pista y solo pudo ser octavo en el oficial, a medio segundo del más rápido. Que esta vez fue Alex Rins, que logró su segunda pole de la temporada confirmando las buenísimas sensaciones mostradas a lo largo de todo el fin de semana de las cuatro sesiones de entrenamientos terminó primero en tres-. Junto a él saldrá el domingo Tito Rabat, que cuenta con una buena oportunidad de recortar puntos en la general a Zarco. Este será el centro de atención de una carrera que busca dar algo de emoción a una categoría muy cerrada cuando todavía quedan nueve carreras para que finalice la temporada.

En Moto3 Danny Kent volvió a poner las cosas en su sitio, dominando los dos entrenamientos del sábado y firmando su cuarta pole de la temporada. Una pole ajustada con solo 88 milésimas de margen sobre Miguel Oliveira, que regresa a la competición tras perderse la prueba de Alemania por una lesión. El portugués debe de ser uno de los rivales más sólidos de Kent de aquí a final de año, aunque todavía se perciba cierta desventaja técnica de KTM respecto de Honda -en pocas semanas la marca austriaca debería de poner en pista un nuevo chasis con el que tratar de reducir esa diferencia-. Tanto el líder de la general como Oliveira mejoraron el mejor crono histórico de una Moto3 en Indianápolis. La sorpresa llegó de la mano del malayo Zulfahmi Khairuddin, que completó la primera línea -un piloto que llegó a subir dos veces al cajón en 2012 pero que desde entonces había desaparecido de los puestos delanteros-. En la segunda línea se metieron tres jóvenes potentes, Enea Bastianini, Fabio Quartararo y Niccolò Antonelli, con Efrén Vázquez séptimo como mejor español. El piloto vasco buscará sus opciones en el escenario de su primera victoria mundialista -el año pasado-, mientras que también destacaron Jorge Navarro, noveno, y el debutante Jorge Martín, décimo.