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E. ALONSO
GIJÓN.
Viernes, 8 de enero 2021, 01:48
En los aos 70 había para elegir. Todos eran muy diferentes. Pero, con el paso de los años, hasta los pilotos casi se confundirían al subirse a os monoplazas. Los F-1 eran demasiado iguales. Ahora, sin embargo, parecen tomar otro rumbo y un aire de renovación se respira incuso a la hora de decorar los coches.
Alpine F1 Team -la antigua estructura de Renault bajo una nueva denominación- deslizó ayer ls primeras imágenes, en movimiento, del monoplaza que pondrá en manos de Fernando Alonso para revivir antiguos éxitos. Apenas un parpadeo d ojos. Cinco segundos de vídeo -que podría haberse preparado para la presentación de la planificación de Alpine que hará la próxima semna Luca de Meo, el nuevo CEO de Renault y expresidente de SEAT-, pero que, no obstante, dan tiempo para, al menos, tener un esbozo de l nueva unidad de 2021, muy diferente, aparentemente, a su predecesor.
La casa gala sigue dando detalles con cuentagotas del nuevo poyecto, que seguirá conservando su tradicional color negro, pero que dirá adiós al amarillo, otra de la señas de la brillante historia autoovilística de la marca francesa. En la escudería Alpine se ha instalado, ahora, un rabioso deseo de revancha, de regreso a sus mejores años. Pra eso han hecho el esfuerzo por contratar a un número 1 como Alonso con el reto de convertir su monoplaza en un coche ganador.
l vídeo comienza con el coche en una carretera de montaña. Sinuosa. Nevada. Se ve, primero, el 'endplate' -el perfil vertical situao en los extremos del alerón delantero-, en el que aparece el nombre del equipo. Luego, se observa el lateral del coche: negro, co los colores de la bandera francesa -azul, blanco y rojo- sobre la tapa del motor. El Alpine se pierde antes de que De Meo pronuncie la frase «la imagen que vosotros veis».
No será el único. Luca de Meo ha apostado de forma muy ambiciosa por la F-1. Primero, con la contratación de Fernando Alonso. Después, con decisión de darle a Alpine el testigo de Renault. Y, ahora, con la contratación de Davide Brivio como responsable de la escudería. El italiano, el nuevo jefe del asturiano, es el hombre que convirtió en 2020 a la marca de motos Suzuki en campeona del mundo de MotoGP, junto al piloto Joan Mir. Anteriormente, fue el director del equipo Yamaha, en el que trabajó con Valentino Rossi.
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