«El Santa Olaya vuelve a donde debería estar»

La formación fabril dejó claro desde la primera prueba que era la escuadra a batir por el título de Primera División y por una de las dos plazas que permitirían retornar la próxima temporada a la élite de la natación nacional. «Todas hicimos un buen trabajo desde el comienzo del campeonato», señala una satisfecha Paloma Marrero.

El equipo gijonés llegó a Castellón con el convencimiento de que se encontraba ante una buena ocasión para regresar a la división de oro. El capítulo deportivo era importante, pero también la unión entre todas las componentes de la formación. Las fabriles hicieron bueno, una vez más, el lema del club: 'La fuerza de un equipo'. La deportista del club de El Natahoyo considera que en esta cita «fue importante cómo nos arropamos unas a otras y cómo luchamos por cada victoria para el equipo».

Marrero volvió a la competición esta temporada en la Copa de España por Clubes, tras una lesión que le impidió participar en el nacional de invierno. Lo hizo logrando varias victorias parciales para el Santa Olaya, por lo que se encuentra ilusionada ante su futuro, aunque reconoce que «no estoy recuperada del todo». «Tocaba luchar y aportar el mayor número de puntos que pudiera. Creo que lo he logrado», explica.

El esfuerzo de todas las nadadoras ha hecho que el equipo femenino vuelva a codearse con la élite de los clubes españoles. «El Santa Olaya vuelve a donde debería estar», asegura Marrero, que hace hincapié en que se encontró «muy bien nadando en Castellón». No en vano siempre se siente muy arropada en la Comunidad Valenciana, de donde procede su madre, aunque «hubiese sido mejor que la Copa se hubiese celebrado en Gijón y haber tenido la oportunidad de lograr el ascenso en casa».

Para la nadadora fabril, que cumple su tercera temporada en el club, la clave del éxito está en que «este es un equipo joven que ha ido haciéndose y creciendo deportivamente estas últimas campañas». «Los buenos resultados comienzan a llegar ahora», incidió. Marrero pasará las fiestas navideñas en su Mérida natal. Sin embargo, su ambición deportiva la lleva pensar en su próxima gran cita. Será en el mes de marzo en el nacional, al que espera llegar en su mejor momento, lograr la mínima olímpica y repetir convocatoria en el Europeo.