Roberto Iglesias e Iván García, campeones de España de boxeo

Fue un torneo muy disputado, con mucha calidad y una gran participación femenina. «El boxeo español, en la categoría junior y joven, ha pegado un salto muy grande de cara a la tecnificación. Hay mucha más calidad ahora. La base del boxeo español ha crecido mucho. De hecho, en los combates internacionales se está notando mucho», apunta Andrés Santurio, uno de los técnicos. Algo que también se ve reflejado en el Principado. «El boxeo asturiano está a muy buen nivel, dentro de que somos una provincia pequeña, tenemos siempre muy buenos resultados», añade.

Su entrenador se deshace en elogios al hablar de Roberto Iglesias. El joven, con apenas 16 años, tiene un gran bagaje en el boxeo tanto nacional como internacional. «En Roberto tenía muchas esperanzas porque ya había sido campeón de España cadete en 2019. Y tiene una progresión muy buena», reconoce.

El joven, sin embargo, tiene los pies en la tierra. «Es todo entreno, ganas y constancia», admite. «Al final lo conseguí. Yo confiaba en que este título lo iba a ganar. Llevo desde los nueve años entrenando y tomándomelo en serio mucho tiempo y creo que sí, me merecía ganar. Creo que esta era la oportunidad», apunta Iglesias.

Todavía es adolescente, pero tiene muy claro que el boxeo es una de sus grandes pasiones. No quiere que su palmarés se quede ahí, si no que prefiere continuar alimentándolo. «Sí que me planteo seguir con el boxeo. Empecé desde muy pequeño, cogí muchísimo cariño a este deporte y sí, lo veo como algo futuro. Estoy muy contento con el trabajo», reconoce. De todos modos, prefiere ser precavido: «Pienso siempre en el presente, tengo dos combates dentro de poco, prefiero no ir más allá», sentencia con convencimiento y una madurez en la voz difícil de encontrar en chicos tan jóvenes. Roberto Iglesias ya forma parte del presente y futuro del boxeo nacional y asturiano.