Mujeres líderes

Dos equipos, los más representativos del deporte femenino gijonés, en la élite, en lo más alto, atravesando, sin duda, un gran momento. Uno, el Telecable Gijón, colíder de la OK Liga Femenina de hockey sobre patines. El otro, el Unicaja Banco Gijón, segundo clasificado de la Liga Iberdrola de balonmano. El papel de la mujer, con una fecha tan señalada como la del 8-M a la vuelta, cobra en esta caso todavía mayor protagonismo a través del mundo del deporte, algo de lo que todas ellas dicen sentirse «tremendamente orgullosas».

EL COMERCIO reunió ayer a las plantillas de los dos conjuntos. Unas y otros coinciden en que queda mucho camino por recorrer hacia la igualdad. No obstante, afirman que se han dado pasos importantes para un equilibrio más real entre hombres y mujer. Y en la memoria late aún con fuerza el recuerdo del Longchamp pese a las cuatro décadas transcurridas. Con su doblete al ganar la Liga y la Copa de la Reina, abanderó en aquel momento el deporte femenino de esta disciplina, que disfrutó de cómo hasta tres equipos en Gijón hacían historia. Ahora son el Telecable y el Unicaja los que toman el testigo en la cima del deporte de competición.

Las jugadoras del Unicaja Banco Gijón Cecilia Cacheda, María Palomo y María González, las más madrugadoras del encuentro, pusieron con palabras y en voz alta una de sus preocupaciones. Pese a la excelente marcha deportiva del equipo, afirmaron, «no tiene la suficiente repercusión, como sí sucede con el deporte masculino». En este sentido, todas ellas participaron animadamente en el debate. Pero, de manera especial, Marizza Faría. La capitana del conjunto gijonés considera que «aún no es suficiente». «Tenemos que seguir luchando por la igualdad, a pesar de que lo estamos reivindicando desde la cancha con excelentes resultados en cada partido», hizo hincapié.

La jugadora paraguaya del conjunto gijonés, que esta temporada vio cómo su hija Yeruti debutaba a su lado, puso de relieve que el equipo «va seguir soñando porque lo estamos haciendo muy bien en la Liga y luego tendremos la Copa de la Reina, en la que hay una gran ilusión por parte de toda la plantilla».

Pasando del pequeño balón al stick, Sara Lolo, que porta el brazalete de capitana del Telecable Hockey, tomó la palabra para afirmar con rotundidad que «hay mucho camino por recorrer». «No nos queda más remedio que seguir luchando sin tregua para equipararnos al deporte masculino», insistió. También aludió a las diferencias salariales, aunque, en este sentido, agradeció que la Federación de Patinaje haya hecho gestos como los de celebrar la Copa de Rey y de la Reina a la vez «para dar la misma importancia a las dos competiciones».

La portera del Unicaja Banco Gijón, Raquel Álvarez, recogió el guante en una animada discusión y, en el mismo sentido, señaló que «somos los equipos de máxima categoría de la ciudad y de la región en nuestros deportes, pero, sin embargo, no se reflejan nuestros éxitos como en el deporte masculino». Todo ello le hace pensar que «todavía tenemos que trabaja mucho para que se equipare» y cree que «se han hecho bastantes avances, aunque aún no es suficiente».

Sara Roces, máxima goleadora del último Europeo de hockey sobre patines, no piensa que el reconocimiento se haga en la medida adecuada porque, a su juicio, «no se valoran los títulos de las chicas tanto como los de los chicos», aunque sí admite que «las cosas han mejorado en los últimos años». Palabras que comparten con una sonrisa Marta Piquero, Fernanda Hidalgo y Elena Lolo, por parte del equipo de Mata-Jove, y Aida Palicio, Juliana Borges y Jazmín Mendoza, por el 'siete' del Pabellón de la Arena.

Tanto el Telecable como el Unicaja Gijón realizaron tras el encuentro el último entrenamiento de semana para seguir soñando con nuevos títulos.

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