Un impulso desde el otro lado del cuadrilátero

«Ha sido un apoyo muy importante en los últimos años para todos nosotros. Es una persona que estaría muy preparada para desempeñar el cargo al que se presenta porque ha estado en puestos de responsabilidad y es un gran conocedor del deporte y, en particular, del boxeo. Tiene nuestro absoluto respaldo», dice Agustín Antuña, miembro del Comité Olímpico Español y de la Academia Olímpica desde 2001.

Consideran los rostros más destacados de la disciplina que es necesario un impulso desde dentro para al fin poder mejorar la visibilidad de este deporte y, también, la percepción por parte de un público, aunque cada vez menor, según afirman, que concibe la práctica del boxeo con perjuicios.

«Creo que el boxeo se observa desde una perspectiva a veces un tanto negativa, al menos por una parte de la gente. Necesitamos de gente que apoye al deporte y que lo defienda. Y los que llevamos muchos años en el boxeo pensamos que Manuel del Castillo puede dar esa visibilidad que necesitamos. En estos momentos cualquier ayuda es buena», explica José Enrique Rodríguez Cal, 'Dacal', que fuera medallista en los Juegos de Munich 1972.

Gonzalo Cortina, que fuera campeón de España, ha sido el principal sustento para que salga adelante la candidatura de Del Castillo, considerando al gijonés como la mejor opción para que el deporte tenga una mejor representación.

Del Castillo, que fue en sus inicios jugador de fútbol en Tercera División hasta los 28 años -Avilés, Marino y Camocha, entre otros equipos- siempre se ha mostrado cercano al boxeo: practicó este deporte durante años, y mantiene la vinculación -su hijo, Justo, también boxea-. En 2018, siendo concejal del PP, se subió al 'ring' para guantear con Laura Fuertes -que fuera campeona de España de peso minimosca- con el objetivo de exigir una mayor atención de las administraciones públicas a los deportes minoritarios.

El gijonés siempre ha defendido los beneficios del boxeo como un deporte que libera estrés, además de ayudar a mejorar los reflejos y la autoestima de aquellos que lo practican. «Hay que revitalizar al boxeo. Necesita de un impulso en estos momentos», insiste Antuña. «La sensación es que a veces han faltado apoyos», mantiene Dacal. Una opinión que comparten los profesionales en la región, que llevan tiempo lamentando la falta de apoyos, y la necesidad de que se dejen a un lado los prejuicios.