Los ajedrecistas lloran la muerte de Julián Iglesias

Julián Iglesias Valle falleció ayer haciendo lo que más le gustaba: participar en un torneo de ajedrez. El delegado de esta sección deportiva en el Grupo Covadonga acudió a la competición escolar organizada en Ribadesella con motivo de la festividad de Halloween. Lo hizo en representación de la Federación de Ajedrez del Principado, de la que era vocal, además de presidente de la comisión de organización de torneos. En un momento dado, comenzó a sentirse indispuesto y le pidió a Arturo González Pruneda -otro miembro de la federación con el que había acudido al torneo-, que le diese las llaves del coche.

Según personas cercanas al fallecido, Julián se sintió peor y ya nada pudo hacerse por su vida. Las primeras hipótesis apuntan a que pudo haber sido un infarto. El ajedrecista era hermano de Enrique Iglesias, colaborador de EL COMERCIO y especialista en esta disciplina. Era una persona muy conocida en Gijón, no solo por su faceta deportiva, sino también porque había trabajado durante años en el sector de la hostelería.

De hecho, estuvo al frente, junto a su hermano, del conocido pub Berlín. Desde muy joven, estuvo vinculado al Grupo Covadonga. De ahí pasó a jugar con el Universidad Campus de Viesques y años más tarde en La Saliana, en La Felguera. Julián Iglesias llegó a a ser campeón de España por equipos y a competir en la división de honor.

Además, tenía la titulación máxima como monitor y entrenador. En el año 2014, recogió el testigo de Francisco Javier Iglesias, 'León', que fue su compañero de equipo en los últimos veintidós años, al frente de la sección de ajedrez del Grupo. «Su fallecimiento ha sido un gran pesar para todo el ajedrez asturiano», señaló Iglesias.

Consternados por la noticia de su fallecimiento, en el Grupo destacaron «su amabilidad, dotes de organización y su especial dedicación a los niños y a la formación de éstos en el ajedrez».

El cuerpo será velado a partir de las seis del martes día 1 y de las cuatro de la tarde del miércoles día 2. Habrá una celebración de la palabra de cuerpo presente en la capilla del Tanatorio Gijón-Cabueñes a las seis de la tarde. A continuación, sus restos mortales serán incinerados en el mismo tanatorio.