Triunfo de pizarra del Langreo (2-1)

Entró el Langreo bien al encuentro, con un Junior que cuajó un buen partido en la parte ofensiva. Apenas había comenzado el encuentro y sin más bagaje que un par de llegadas a la meta contraria, una por cada lado, se produjo una falta favorable a los locales. La lanzó Junior con un balón perfecto al área que remató Cristian ajustado a la cepa del palo para poner en ventaja al equipo dirigido por Samuel Baños. Siete minutos y marcador ya desnivelado.

El tanto local descentró un poco a los luanquinos, que estuvieron algo imprecisos y quizás sobrexcitados en ese tramo de partido. Tuvo el Langreo dos ocasiones más para doblar su ventaja en el duodécimo minuto y en el decimoquinto, con sendos tiros desde la frontal del área. El primero lo atajó Buru y el segundo se fue algo desviado.

Antes de cumplirse la primera media hora de partido, en el 27, otra falta en tres cuartos de campo. De nuevo escorada a la derecha, la botó Juan López y el balón, que no logró rematarlo nadie con claridad en un principio, lo empujó Alain al fondo de la portería con la planta del pie. El Marino no podía generar juego ofensivo, lastrado por las imprecisiones y el nerviosismo. Todavía tuvo otra ocasión el Langreo para ampliar la distancia en una pérdida de balón absurda en defensa del conjunto luanquín. Le entregó la pelota a Jorge Hernández, que se giró para encarar la meta y fue derribado en la frontal del área. Falta peligrosa que ejecutó Nacho, pero su disparo se fue por encima de la portería.

Cambió la cara el Marino en la segunda parte con la entrada de Luis Morán reemplazando a César Suárez. En el tercer minuto de la segunda parte, Gonzalo derribó a Steven dentro del área y el colegiado no dudó en decretar el penalti para el Marino. Se encargó de transformarlo el capitán Guaya para recortar distancias. Se metía el Marino en el partido. El Langreo trató entonces de frenar el ímpetu visitante intentado que pasasen pocas cosas en el encuentro, tirando de oficio e intentando salir a la contra si la situación lo permitía.

Con algunos robos o pérdidas del Marino se generaron ocasiones a favor del conjunto langreano, como la internada de Junior, que centró sin encontrar rematador. La más clara para el equipo luanquín llegó en el minuto 65, con un disparo casi a quemarropa de Julio Delgado que rechazó Adrián Torre en un alarde de reflejos. Imad, que acababa de entrar al terreno de juego, robó un balón y se planta delante de Buru, centrando un balón que se paseó por el área chica sin encontrar rematador para empujarlo.

El Marino que no conseguía estirarse demasiado, tuvo una última oportunidad con un barullo en el área que resolvió Nino con un tiro que se fue por encima de la portería de Adrián Torre. Poco más se pudo ver en un partido que se acabó llevando el Langreo y contó con un arbitraje que en ocasiones pilló a contrapié a los jugadores, con alguna falta clara para ambas partes que se quedó sin señalar. Con esta victoria, el Langreo ha cosechado siete puntos de nueve posibles y se coloca momentáneamente en lo más alto de la tabla, cerrada por el equipo luanquín tras una semana más sin poder sumar.