«Es una cuestión de dejar atrás los errores y seguir avanzando, esto es un proceso largo y hay que tener paciencia»

No ocultó el excentrocampista que un triunfo ante el Marino, en el último partido del año en la tarde de este sábado (15.45 horas), aportaría «un poco de tranquilidad» antes de encarar un paréntesis liguero hasta el próximo 10 de enero. «Es una cuestión de dejar atrás los errores y seguir avanzando», indicó sobre la digestión de la derrota del pasado sábado en el derbi de filiales, que enmarcó dentro del proceso de maduración que está atravesando este curso su equipo. «Esto se trata de seguir aprendiendo todos juntos y superar situaciones que este año están siendo más habituales en lo negativo de lo que suelen ser. Sabemos que el filial siempre tiene ciertas dificultades, pero este año hay algunas añadidas», expresó desde el mismo prisma por el que atenuó la trascendencia y el impacto anímico del resultado que se produzca en el duelo ante los luanquinos, a un punto de distancia de los gijoneses y relegados también al fondo de la clasificación.

«Es un bloque que lleva trabajando con el mismo entrenador un tiempo. Repiten jugadores desde el ascenso, están acostumbrados a una forma de trabajar y a lidiar con situaciones complicadas», señaló sobre su próximo adversario el técnico de Villaviciosa, que recordó que el Marino «tiene varios futbolistas de un nivel muy importante y eso le hace ser un rival muy peligroso». El preparador sportinguista se mostró esperanzado en que las condiciones meteorológicas adversas no condicionen el desarrollo del juego por el encharcado estado del césped, como ocurrió en la pasada jornada. «Aunque ha caído lluvia, estos parones que hay sin ella y con un poquito de viento secan bastante el campo. Creo que va a estar bien», arguyó.

Respecto a lo necesario para revertir la situación que atraviesa el filial sportinguista, aseguró que se requiere «mentalidad, madurar, vivir experiencias con mucha intensidad e ir sumando bagaje a nivel competitivo para conseguir resultados». Consciente de que ese «poso» lo aporta el número de partidos, indicó que si consiguen «adelantar» esa maduración darán por bueno ese «sufrimiento» que afrontan actualmente a nivel de resultados. «Esto es un proceso largo y hay que tener un poquito de paciencia», concluyó.