«Orlegi y Pachuca no son los salvadores del Sporting y del Oviedo»

-¿Sigue viniendo a Asturias?

-He tenido algún problema, me he tenido que operar... Hace cuatro meses, más o menos, que no voy.

-El documental que se estrena mañana sobre su vida se titula 'Supergarcía. He vuelto'. ¿Pero alguna vez se había ido?

-Llevaba 21 años jubilado. La verdad es que me fui. Tuve la mala suerte de que se cruzara en mi camino un señor que fue presidente de este país, el señor Aznar. Él presumía de ser un hombre muy liberal y me encontré todo lo contrario, un dictador. Un compañero y amigo mío, Antonio Herrero, que no era ni del PP ni del PSOE, sino un periodista, llevaba una carrera brillante. Un día me llama Miguel Ángel Rodríguez para que vaya al Palacio de la Moncloa. Me llevo la tremenda sorpresa de que me dice que el presidente me pide, así, directamente, que Antonio no siga en la Cope. Le dije 'Aznar no tiene narices para decírmelo a la cara, te utiliza a ti y, además, quién coño es él para decidir que no siga'. Me dice que les está tratando mal y yo le digo que no, que es periodista y que cuando hacen algo bien les aplaude y cuando no, pues, les censura. Me autojubilé con 59 años.

-Lo cierto es que el 7 de abril de 2002 apagó su micrófono para siempre tras 40 años liderando la radio, sin despedirse.

-No podía seguir. Pensé que, si yo contaba por qué me iba, le iba a hacer un daño grande, grande, a un partido político. Yo no soy del PP, ni del PSOE, pero tengo alguna responsabilidad. Decidí marcharme y no decir nada.

-El documental se promociona como «una historia de poder, de deporte, de política, de radio y de vida. ¿Esa ha sido su vida?

-Más o menos, sí, con alguna aclaración. He tenido la fortuna de saber ocupar mi tiempo y la verdad es que, aunque soy un loco del periodismo, un contador de cosas, no he notado ningún contratiempo. Me he acostumbrado a utilizar mi tiempo y a vivir sin ninguna nostalgia.

-El primer capítulo se titula 'El justiciero de medianoche'. ¿Lo fue?

-Yo nunca he sido un justiciero. He sido un hombre libre con responsabilidad. Soy un católico practicante y un católico no es un justiciero. He aplaudido, he censurado y he ejercicio con mi independencia. Porque el periodismo es independencia, pluralidad... Eso es lo que he intentado hacer. No sé si lo he conseguido. Bueno, sí.

-Mindundis, calzonazos, abrazafarolas... La lista de damnificados fue larga. Una voz en off en el tráiler dice que usted es el mayor cabrón de la historia.

-Yo, ya le decía, llevo 21 años fuera. No he ejercido el rencor contra nadie. He cumplido con mi obligación de ser sincero, de buscar la verdad. No la absoluta, sino mi verdad. No ha habido en este país un periodista que haya tenido más dificultades y problemas que yo. Fíjese. Ahora está de plena actualidad el tema de Vinicius. Hace veinte años, quemaron una pancarta del 'butanito' en el Bernabéu. Un presidente del Real Madrid, no el de ahora, les había dado 6.000 euros a los Ultra Sur para que lo hicieran. No le di importancia. Solo lamenté que mi hijo, el que tenía veinte años, estaba en el campo y se marchó llorando. Y no pasó absolutamente nada. Nadie me pidió perdón.

-¿Se arrepiente de haber hecho algo? ¿Ha pedido perdón?

-Sí, sí. Claro que me equivocado y gravemente. La guerra con José Ramón de la Morena, por ejemplo, nunca tuvo que haberse producido. Nos equivocamos los dos. Pero no guardo rencor. Un día me llama y me dice que si comemos juntos. Naturalmente. Y ahora tenemos una prudente relación.

-¿Sabe que De la Morena canta disfrazado de gnomo en un programa de televisión?

-No lo sabía. ¿En qué programa?

-En 'Mask Singer', en Antena 3.

-No me había enterado. Pero si le apetece y le gusta hacer eso...

-¿Se lo imagina?

-No soy quién para meterme en vidas ajenas. Pero me sorprende. El problema es que, no sé si usted estará de acuerdo, hay una decadencia en el periodismo. Hay una situación preagónica. España es un país complicado. En EE UU, el empresario entiende que la publicidad es una inversión y cuando hay crisis redobla sus esfuerzos. Aquí, el empresario entiende que es un gasto. La situación es lamentable y absolutamente penosa.

-Gente como Perico Delgado, el propio Aznar, Florentino Pérez y Valdano han rehusado participar en el documental.

-Cada uno es libre de hacer lo que le guste. Esta gente que no ha querido participar por algo será. La gente que ha mencionado está a las órdenes de Florentino.

-Lo tiene en la diana.

-No tengo una buena relación. No se puede negar que el Real Madrid tiene un buen equipo, pero para mí no es el presidente de un club grande. La imagen del Madrid con Florentino ha quedado muy distorsionada. Ha estropeado su historia a pesar de todos los títulos.

-¿Le ha sorprendido alguien que aparece en el documental?

-No. Solo he pedido a la productora que no quería un documental que fuera exclusivamente para contar la grandeza de José María García. Quería un documental real, con mis virtudes y mis defectos. Unos han sido excesivamente generosos y otros, claramente injustos. Me han llamado desde 'hijo de puta' hasta 'mafioso'.

-Déjeme que le pregunte por el deporte en Asturias. Parece que solo brillamos a nivel muy individual y casi ni eso.

-Desgraciadamente, Asturias es de segunda división. El Oviedo y el Sporting zozobran desde hace muchos años en la parte baja. Dígame un deporte colectivo que destaque en Asturias...

-Tenemos un conjunto femenino de hockey patines seis veces campeón de Europa y dos equipos también femeninos jugarán la próxima temporada en la máxima categoría del balonmano.

-Sí, pero son deportes minoritarios. No obstante, hay que premiar a estas jugadoras su esfuerzo.

-Al final nos queda poco menos que el Oviedo y el Sporting.

-Los niños siempre buscan imitar a alguien. A excepción de Fernando Alonso, dígame qué figuras... Nada. Espero que los políticos se pongan de una ver a servir y no a servirse del deporte.

-Dos grupos mexicanos han llegado como los salvadores se que necesitaban en Oviedo y Gijón.

-¡No, hombre! ¡Qué van a ser los salvadores que necesitaban! No lo son. Todos los que han venido de fuera, fíjese el Valencia o el Málaga, ha sido para hacer negocio aquí y llevarse el dinero. No han mejorado absolutamente nada desde que están en Asturias.

-Orlegi quiere el Mundial 2030 en Gijón con un proyecto de 300 millones, tirar El Molinón...

-Hay que pensar con cabeza. ¿A cambio de qué van a dejar 300 millones aquí? ¿Quién ha traído dinero porque quiere a Asturias? Y, luego, ¿qué empresarios asturianos han venido para mejorar esto? No ha habido absolutamente nadie.

-¿Y qué le parece que forme un Sporting C en el que jueguen futbolistas de pago?

-El desconocimiento en el que viven es atroz. ¡Cómo se va a pagar por jugar en el siglo XXI?

-Los dos clubes se han desprendido de los jefes de sus servicios médicos: Manuel Rodríguez y Antonio Maestro.

-A Maestro lo conozco menos, pero a Manuel Rodríguez, sí, desde hace muchos años y es un superprofesional. No saben hacer nada. No hay lógica ni cabeza.

-Usted fue muy crítico con Luis Enrique como seleccionador.

-Lo sigo manteniendo. Es un hombre con una soberbia tremenda y busca un protagonismo absurdo. Desde le primer momento no me gustó. Le deseo lo mejor, pero no ha estado acertado ni brillante ni como técnico ni como persona.

-Y también con los Premios Princesa de los Deportes.

-Fui incluso secretario del jurado. Algún día contaré cosas sabrosas...

-Cuente, cuente.

-La votación de este galardón no era justa. Era una contienda periodística entre Madrid y Barcelona.

-Echando una mirada, ¿qué escenario ve en el deporte español?

-El deporte español está bien, pero podría estar muchísimo mejor. Aguardo el día en el que los políticos se den cuenta de lo que significa el deporte para las personas. Es invertir en salud. Los políticos utilizan al deporte, pero no sirven al deporte. España en un país de deportistas. Fíjese ahora en la irrupción de Alcaraz, el tenista, cuando se nos va desgraciadamente un grande, grande, como Rafa Nadal. El tiempo no perdona. Es uno de los tres mejores deportistas españoles de la historia.

-¿Quién serían los otros dos?

-Induráin y, posiblemente, aunque se nos ha ido ya, Manolo Santana.

-¿Vio el partido del Valencia-Madrid, el de los insultos contra Vinicius?

-España, hay que dejar esto claro, no es racista, pero hay racistas como en otros países como Inglaterra, Italia, Alemania... El caso de Vinicius es espectacular. En poco tiempo se ha convertido en uno de los mejores futbolistas del mundo. Pero hay un problema. No tiene formación. Nace en un favela, pasa muchas necesidades, pero llega a España y se convierte en una estrella, se hace millonario y le persiguen las chicas. Y, en lugar de soportar todo esto, provoca, hace señales, dice a Mestalla que a Segunda... No está equilibrado. El presidente del Madrid o un botones tendría que darle consejos, recomendaciones. Yo no condeno a Vinicius, pero no estoy de acuerdo con lo que hace.

-El problema del racismo no es nuevo. Pasó con Eto'o y con el meta del Rayo Wilfred.

-Se ha cambiado poco. No se puede negar la utilidad de las redes sociales, pero el anonimato es condenable. Después viene una dificultad añadida. El Comité de Competición normalmente no quita una tarjeta. ¿Por qué lo hace en este caso con el brasileño Vinicius?

-¿Para quedar bien a nivel internacional?

-Para quedar bien con el Real Madrid. Se la quita la Federación Española cuando el presidente del club blanco inicia una guerra contra Luis Rubiales.

-¿El pulso que mantienen Javier Tebas, Luis Rubiales y el propio Florentino favorece a alguien?

-No, perjudica gravemente al deporte español. Pero yo he dicho, y lo sigo manteniendo, que, a pesar de todos sus títulos, el presidente del Madrid es el peor de la historia. Ha enfrentado al club con medio mundo. ¿Por qué? Por soberbia.

-¿Cuál puede ser la solución? Los insultos llevan enraizados muchos años ya en los campos.

-Hay que obrar en consecuencia y tomar medidas adecuadas. Pero usted decía antes una realidad: el deporte español es un lodazal en el tema de los despachos. El presidente de la Federación no se habla con el de la Liga, yo soy más que tú... Un auténtico desastre.

-¿Falta valentía para dar un paso adelante?

-Exacto. Nadie tiene esa valentía. ¿Cuánto tiempo han dejado pasar para detener a los que 'ahorcaron' un muñeco que representaba al brasileño? ¿Por qué no los detuvieron el día que la pusieron ya que estaban identificados?

-El problema es que se traslade a los colegios, por ejemplo.

-Pues, sí. Las autoridades tienen que tomar medidas radicales y que lleguen sanciones adecuadas.

-La Federación se ha cargado a seis colegiados del VAR, entre ellos el de Mestalla.

-Lo del VAR es un auténtico desastre. El gran error es que quien lo dirige es compañero del árbitro principal.

-¿Y del 'caso Negreira' qué me puede decir?

-Ha venido pasando en los últimos 40 años. Yo recuerdo que hice una investigación y echaron a siete árbitros. Un colegiado de Primera y que es internacional cobra 500.000 euros al año y, si no lo es, 350.000. El triple que en la Premier.

-¿El Barça lo 'ficho' porque podía influir en los resultados?

-No creo que pudiera. No es la primera ni será la última vez que pasa. Todo el mundo ha buscado sus ayudas, pero dejarlo firmado, rubricado... Es de locos.