Manu García alcanza las 'semis'

El mediapunta del Sporting, ausente en el amargo desenlace liguero frente al Almería que siguió desde tierras eslovenas repleto de nervios, evitó al final la emboscada de Croacia en su regreso al torneo. En los cuartos de final, España se topó con una dura piedra en su camino para revalidar su título de campeón y obtener su sexto entorchado continental. Lo sorteó aferrado a la pegada de Puado, decidido a ponerle el broche de oro a su excelente temporada, en la que desempeñó un rol protagonista en el retorno exprés del Espanyol a la máxima categoría.

El atacante 'perico' apeó a la selección ajedrezada con un doblete que enmendó el penalti cometido por Guillamón en el tiempo añadido de la segunda parte. No desaprovechó esa oportunidad desde los once metros Ivanusec, el capitán croata, con nervios de acero para dirigir su lanzamiento a la escuadra. El empate cuando el cronómetro arañaba los últimos segundos confirmó el duelo incómodo para el conjunto dirigido por Luis de la Fuente, 'in crescendo' para sacudirse el agobio inicial de los croatas. Bajo las directrices de Igor Biscan, que se empapó de las enseñanzas de Rafa Benítez en Liverpool, los balcánicos maniataron a los centrocampistas españoles, que con el paso de los minutos consiguieron adueñarse del balón para comenzar a gobernar el partido.

Tras el descanso, un pase largo de Manu García estuvo cerca de situar libre de marca frente al portero al debutante Fer Niño, con el que volvió a asociarse el ovetense en una triangulación que no consiguió culminar Brahim Díaz en gol. El empuje español lo rubricó Puado, oportunista para enviar a la red una internada desde la izquierda del punzante Bryan Gil. Yeremy Pino, flamante ganador de la Liga Europa, perdonó el segundo tanto al enviar alto su remate desde el corazón del área sin cancerbero que cubriese la portería y Croacia encontró el empate en el último suspiro.

El golpe no hizo mella en el grupo que dirige Luis de la Fuente, que reaccionó en la prórroga. Manu García rozó el segundo tanto después de un pase de Miranda en el tramo final de la primera parte de la prórroga y Puado selló la victoria con una acción individual que mezcló potencia y sangre fría para que España luche por una plaza en la final del torneo el jueves (18 horas), de nuevo en Maribor.