El Athletic le gana el derbi al Alavés y ya mira a Europa

El Alavés ha sumado tres victorias en los últimos cuatro partidos ligueros para salir también de la zona de peligro en la que llevaba toda la temporada y que le sigue amenazando, ya que solo le separa de ella el average con el Deportivo de La Coruña.

El conjunto vitoriano, además, tiene la clasificación para los cuartos de final de la Copa del Rey más que encaminada tras ganar el miércoles en el campo del equipo que eliminó en dieciseisavos al bilbaíno, el Formentera.

A pesar de que va levantando cabeza, el Athletic dista de vivir una situación idílica. Ya que, además de los manifiestos problemas para elaborar un juego convincente y que ilusione a su afición, el asunto de Kepa Arrizabalaga y su interminable fichaje por el Real Madrid está empezando a hartar al entorno rojiblanco.

Precisamente Kepa es uno de las bajas seguras en el equipo bilbaíno para mañana, ya que esta semana recayó en la lesión en el pie que arrastra desde hace unas semanas.

Junto al meta de Ondarroa, son ausencias seguras en el Athletic los también lesionados Iker Muniain, este de larga duración, y Mikel Balenziaga, y el sancionado Unai Núñez, quien cumplió ciclo de amonestaciones en la última jornada en el Benito Villamarín.

Sí estará en la convocatoria Yeray Álvarez, que, casi ocho meses después de su último partido oficial y tras superar un cáncer testicular del que recayó en junio, podrá suplir la baja de Núñez. De todos modos, junto a Aymeric Laporte en el centro de la defensa se espera a Xabi Etxeita, tercer central durante toda la temporada. Y también a Enric Saborit en el lateral izquierdo de un once en la línea del bloque que en las últimas jornadas ha mejorado las prestaciones de los de Ziganda.

Un equipo con Iago Herrerín bajo palos, Lekue completando la línea defensiva, Iturraspe y Mikel Rico en el doble pivote, De Marcos y Susaeta en las bandas y Raúl García y Aduriz arriba. Aduriz, que fue suplente en Heliópolis, relevaría así en la punta de ataque a Williams, que jugó de titular en Sevilla pero no pasa por su mejor momento.

El cuadro alavesista quiere mantener su racha ante los rojiblancos ya que no ha perdido en los cuatro últimos encuentros, en los que ha conseguido dos victorias y dos empates.

Abelardo Fernández podrá alinear a su once de gala ante el Athletic, aunque cabe la posibilidad de que el central Rodrigo Ely entre en el grupo desde el inicio.

Además de los lesionados Héctor Hernández y Carlos Vigaray se quedarán en Vitoria, fuera de la convocatoria Víctor Laguardia, que regresará a los terrenos de juego en el choque vuelta ante el Formentera, el venezolano Christian Santos y el serbio Aleksandar Katai.

Así, Fernando Pacheco ocupará la portería babazorra y estará apoyado por una línea defensiva compuesta por Martín Aguirregabiria, Alexis Ruano, el chileno Guillermo Maripán y Rubén Duarte.

Tomás Pina y Manu García regresarán al centro del campo, mientras que las posiciones ofensivas volverán a ser ocupadas por Alfonso Pedraza, Jorgue Burgui, Ibai Gómez y Munir como hombre más adelantado.

El Athletic Club se impuso por 2-0 al Deportivo Alavés en el derbi vasco disputado este domingo por ambos equipos en San Mamés y el equipo de José Ángel Ziganda, que llevó a verse amenazado por los puestos de descenso, ya mira más a la parte europea que a la zona baja de la tabla clasificatoria.

Fue una victoria plácida del equipo bilbaíno, que apenas encontró problemas en un Alavés que recordó a sus peores momentos de la temporada, y plasmada por tantos de Xabi Etxeita, al comienzo del choque, y Aritz Aduriz, este de penalti y ya en la segunda mitad.

El gol de Etxeita llegó en un saque de esquina que el central vizcaíno remató a bote pronto y dio en un rival antes de entrar, imposible, para Fernando Pachecho, en la meta visitante. Aduriz marcó su decimocuarto gol de la temporada, el sexto en Liga, al transformar una más que dudosa falta máxima de Alexis Ruano sobre Raúl García.

Con esta victoria, la primera en diez años en un arranque de año, el Athletic escapa ya nueve puntos de unos puestos de descenso a los que precisamente cayó de nuevo el Alavés por el empate del Deportivo de La Coruña en Villarreal. Los de Cuco Ziganda, además, se acerca a cuatro puntos de las plazas europeas. Comenzó mejor el Athletic, más profundo y con mayor peligrosidad sobre el campo rival dirigido y lanzado por Iturraspe, de cuyas aperturas salieron las primeras llegadas de su equipo.

En la primera de ellas, Pacheco mandó a córner un fuerte disparo de Williams, a centro de Saborit desde la derecha. Y de ese saquen de esquina llegó el primer gol. Etxeita enganchó a bote pronto el centro de Iturraspe, el remate dio en un defensa visitante y el balón se envenenó para entrar por la escuadra, en parábola y con Laporte a punto de remachar sobre la línea.

Fue el primer mazazo para el Alavés, que rápidamente recibió el segundo con la lesión de Burgui al intentar una arrancada con la pelota. Precisamente Brugui había llevado a cabo el primer acercamiento serio babazorro hacia la meta de Herrerín. Una contra que el jugador pacense acabó con un disparo desviado desde lejos. Solo tuvo un par de ocasiones de hacer peligro más 'el Glorioso' en toda la primera mitad. Una salida rápida ante Pedraza de un Iago que se jugó el penalti y un lanzamiento de falta, alto, de Ibai.

Por lo demás, todo el peligro del primer tiempo fue del Athletic, que contó hasta con cinco oportunidades de ampliar su ventaja. Dos de ellas clarísimas de Raúl y Aduriz y con grandes intervenciones de Pacheco. Que mandó a córner sendos remates a bocajarro de los goleadores locales, el del navarro con la cabeza y el del guipuzcoano con el pie.

Un pase de Williams que no empaló Aduriz, un intento de gol olímpico de Iturraspe en un córner que dio en el larguero y un fuerte disparo desde la derecha de Williams, sin apenas ángulo, completaron el cupo de ocasiones de un Athletic que mereció llegar al descanso con más ventaja.

Uno de los momentos más emotivos de esa primera mitad fue la cerrada ovación con la que recibió San Mamés a Yeray Álvarez cuando el bravo central de Barakaldo salió a calentar por primera vez en un partido oficial desde que recayese en junio del cáncer testicular del que ya está recuperado de nuevo.

El primer acercamiento a vuelta de vestuarios fue del Alavés, de Bojan y apenas importante, pero la respuesta de De Marcos abrió una nueva fase de dominio local, si bien sin gran juego de los rojiblancos. Sendos centros de Susaeta y Williams precedieron a la primer gran ocasión bilbaína de la segunda mitad. Fue de Aduriz, a pase de Williams, pero el ariete internacional volvió a encontrarse con Pacheco, el mejor sobre el terreno de juego junto a Iturraspe.

Y en la continuación de esa jugada llegó el penalti, más que discutible, de Alexis sobre Raúl García que permitió a Aduriz marcar el 2-0 desde los once metros y finiquitar el partido. Ese tanto era el decimocuarto en lo que va de temporada del ariete internacional, el sexto en lo que va de LaLiga.

En el tramo final del choque, Williams y Etxeita amenazaron con el 3-0 y Pedraza pudo dar emoción a los últimos minutos con el único remate de su equipo sobre la meta de Iago Herrerín en toda la segunda parte.