El Barça encarrila la clasificación, salvado por Ter Stegen

Las autoridades sanitarias obligaron a jugadores y técnicos del Dinamo de Kiev a pasar un nuevo control este martes por la mañana en el hotel, ya en Barcelona. Por la tarde se conocieron los resultados: todos bien, aptos para jugar. El club ucraniano, antes de volar desde Kiev el lunes, anunció seis nuevos positivos (Georgy Tsitaishvili, Denis Garmash, Mikkel Duelund, Alexander Karavaev, Tudor Belutse y Mykola Shaparenko) que se unían a los tres ya conocidos anteriormente: el central Vitaliy Mykolenko y los dos porteros del primer equipo Denys Boyko y Heorhiy Buschan. Por si fuera poco, Sydorchuk está sancionado. Y hay tres lesionados más de larga duración. En definitiva, trece bajas que ya se quedaron en Ucrania Además, los análisis detectaron el coronavirus en el segundo entrenador, Emil Karas, y en otros cuatro miembros del cuerpo técnico del Dinamo.

Lucescu logró citar a 19 jugadores entre la primera plantilla, el filial y el juvenil, entre ellos Nescheret, un portero de 18 años que tendrá que lograr que a Messi se le siga resistiendo su primer gol de jugada del curso. Lleva tres de penalti: uno en Liga y dos en Europa. Precisamente, el argentino fue noticia en la previa porque Ronald Koeman negó que sea un jugador tan difícil de gestionar como aseguró Quique Setién: «No estoy de acuerdo, pero respeto su opinión. Hablo cada semana con él de cosas del equipo y del vestuario. Cada día muestra su carácter ganador».

Ter Stegen, operado de la rodilla el 18 de agosto, pocos días después del 2-8 ante el Bayern, recibió el alta médica tras la última sesión matinal previa al partido, entró en la convocatoria y estará bajo palos. Su recuperación llega justo después del fallo de Neto en Vitoria que costó el gol del 1-1, una circunstancia que elimina dudas sobre la conveniencia del regreso inmediato del alemán a la titularidad.

Koeman hará rotaciones. Las bajas por lesión de los centrales Araujo y Umtiti le harán conformar un eje defensivo con Piqué y Busquets. Dest entrará en el lateral derecho y Pjanic en el doble pivote. Arriba también sigue de baja Coutinho por lo que Messi, Pedri, Griezmann y Ansu Fati son fijos por delante de Trincao y Braithwaite.

El técnico neerlandés, por cierto, aseguró este martes que no tiene problemas para conducir a Leo Messi. Salió así al paso de unas declaraciones de su predecesor, Quique Setién en las que el técnico cántabro afirmó que era difícil gestionar al astro argentino. «Leo es un jugador muy, muy bueno, es el mejor del mundo para mí y estoy viendo todo los días su ambición y su carácter ganador», afirmó Koeman en la rueda de prensa previa al duelo ante los ucranianos. «No es un jugador del equipo al que tenga dificultades de llevar, pero cada entrenador es diferente», añadió el técnico azulgrana, precisando que respeta la opinión de Setién. «Para mí es el capitán y hablo con él cada semana sobre cosas del campo y del vestuario», zanjó Koeman.

Tres jornadas le han bastado al Barcelona para encauzar el pase a octavos de final de la Liga de Campeones.

El gran paso lo dio el Barcelona en Turín frente a la Juventus, pero había que refrendarlo ante el Dinamo para así además alejar a los fantasmas que le rondan en Liga, donde no gana desde hace más de un mes. Dicho y hecho. Ni cinco minutos duró el 0-0 en los marcadores del Camp Nou vacío.

Donde se marcó el primero pudieron celebrarse un segundo, un tercer, un cuarto tanto… Y alguno más. Sin embargo,

Las trece bajas del Dinamo, nueve por positivos en covid-19, ayudaron a que el Barcelona se desatara de inicio.

El Barcelona no aprovechó para sacar buena renta de su gran arranque y Neshcheret

La segunda parte comenzó del mismo modo que había terminado la primera: con un paradón de Ter Stegen, que le ganó el uno a uno a Tsygankov con determinación en la salida. En el córner consiguiente, Kedziora anotó de cabeza un gol que no subiría al marcador, pues el centro con rosca había sobrepasado la línea de fondo. Poco después, Ter Stegen evitó de nuevo el empate con un pie salvador al duelo contra Supryaha.

Aunque no recuperó el nivel de juego del primer cuarto de hora, el Barcelona al menos volvió a acechar la portería de Neshcheret. El joven ucraniano descolgó de la escuadra una falta de Messi y repelió un testarazo a bocajarro de Sergi Roberto, pero nada pudo hacer ante el

El arranque del Barcelona no pasó de una ilusión cuando el mermado Dinamo se quitó de encima los complejos, y aunque el triunfo sella virtualmente la clasificación azulgrana