«Yo juego siempre al cien por cien, no me va a cambiar este partido»

Apoyado en su experiencia y en un rebobinado a los derbis de su vida, el defensa aseguró que «en el campo no se disfruta tanto porque se juega a cara de perro», y consideró que «los derbis se juegan parecido en todo el mundo: son partidos duros y trabados». También deslizó que el Oviedo «tendrá que tomar la iniciativa» por su condición de equipo anfitrión, aunque, avisó, «tenemos un ADN como equipo».

El balance negativo de los derbis en el Tartiere, con más de veinte años de la última victoria del Sporting y seis partidos sin ganar, Izquierdoz lo relativizó. «En esos veinte años, muchos no se jugó y es normal de local obtener mejores resultados», explicó. En todo caso, aseguró, «no jugamos con eso en la cabeza» y concluyó que «qué mejor motivación que esa para nosotros».

Considerando que el derbi llega en «un buen momento del equipo», el defensa solicitó que «lo que no puede faltar nunca es la intención de ganar el partido». Y ante un fin de semana especial para un argentino por la final del Mundial, tuvo el orden de prioridades claro: «Lo único que me importa es el derbi y luego ya alentaremos a la Selección».

Preguntado por quién sería Boca y quién River, a su escala, en el derbi asturiano de mañana, Izquierdoz lo tuvo claro: «Para mí, el Sporting es Boca. Más allá que los colores son distintos, veo esa pasión aquí».