Un error del Lealtad da los tres puntos al Marino

Clemente Sánchez tuvo que introducir un cambio de última hora en la alineación. Gayoso iba a ser de la partida, pero se resintió en el calentamiento de la lesión sufrida el pasado domingo en el partido ante el Covadonga. En su lugar entró Bruno Herrera, que actuó como lateral diestro, pasando el capitán Miguel Obaya a la izquierda.

Manel Menéndez afrontó su segundo partido como técnico marinista y formó de inicio con el mismo once que ganó al Numancia la pasada jornada, exceptuando el delantero Mendi, ya recuperado de sus molestias físicas, que ocupó el puesto de Enol.

El campo de Les Caleyes se encontraba blando y con bastante agua en su superficie, aunque sin que se formasen charcos visibles desde fuera, pero se podía percibir con las pisadas y los golpeos de los futbolistas. Esto dificultó la circulación del balón a los dos equipos, en un partido que estuvo muy disputado.

Muy pronto se adelantó el Marino, tras un grave error defensivo del Lealtad. René Pérez hizo una cesión a Bussmann dentro del área que se quedó corta por un charco y Mendi, muy atento, se anticipó al meta alemán para cruzar el balón lejos de su alcance con un remate raso que se convertía en el 0-1.

Lo intentó el Lealtad, pero el Marino se mostró bien armado, con una defensa de cinco y dos pivotes por delante como Lora y César Suárez, que mantuvieron el peligro lejos de las inmediaciones de Aramburu. Unai Hernández dio el primer aviso con un tímido disparo desde la frontal, que atajó sin problemas el meta marinista.

El Marino no renunciaba al ataque y en el minuto 24, una falta de Sandoval en su intento de despeje dio lugar a un libre indirecto en el borde del área que ejecutó Luis Morán con un potente disparo y su remate acabó en córner. Precisamente los gozoniegos botaron hasta cuatro córners antes del descanso, aunque sin consecuencias.

El paso por vestuarios cambió el partido. Clemente movió ficha y permutó la posición de Unai Hernández por la de Kofi Atta. El vasco pasó del extremo zurdo a la punta de ataque y el Lealtad entró con otro brío a la segunda mitad. Los de Villaviciosa pusieron cerco al área marinista en los primeros compases, en los que generaron más peligro que en toda la primera mitad.

Unai Hernández lo intentó de chilena a centro de Juan Mera y el gijonés probó fortuna en la siguiente jugada, pero Aramburu despejó a córner. En el saque de esquina fue Kofi Atta el que cabeceó el balón al travesaño. Fueron los mejores minutos del Lealtad, que salió en tromba, pero el Marino se recompuso tras este arreón inicial y consiguió rebajar el ritmo de juego, generando algún problema en ataque con un activo Mendi, que generó problemas a la pareja de centrales maliaya.

El Lealtad siguió intentándolo hasta el final, aunque lo cierto es que Aramburu no tuvo demasiado trabajo. Las más claras fueron un testarazo de Maissa y un remate de Iriondo, pero en ambos casos salieron desviados.

Esta derrota mantiene al Lealtad en el ecuador de la tabla, con catorce puntos, aunque con más partidos que el resto de rivales de la zona baja, que tienen alguno pendiente. A excepción del Marino, que también lleva once encuentros disputados y se sitúa ahora a sólo tres puntos de los de Villaviciosa.