El Tenerife petrifica en 15 minutos al Valladolid y lo apea de la Copa

Será la tercera eliminatoria de Copa del Rey en la que se crucen el Tenerife y el Valladolid. El conjunto pucelano logró el pase en las dos anteriores, en 1991 y 2016.

El equipo tinerfeño, que busca eliminar a un equipo de Primera División en el campeonato copero 19 años más tarde, encara el compromiso de este miércoles con el derbi ante la Las Palmas a la vuelta de la esquina.

Ante la acumulación de partidos durante este mes, el vallisoletano Rubén Baraja prepara cambios en la alineación del Tenerife, en la que predominarán los menos habituales en liga.

Adrián Ortolá, que se ha perdido los últimos tres partidos por una lesión en la mano provocada por un accidente doméstico en Navidades, volverá a ocupar la portería tinerfeñista, mientras que se espera el debut del delantero Joselu como blanquiazul.

No estarán a disposición de Rubén Baraja por lesión Nahuel Leiva, Álex Bermejo, Ramón Miérez y Borja Lasso.

El Valladolid presentará varias novedades con vistas al partido contra el Tenerife con el fin de dosificar a los jugadores, ya que el domingo el Real Madrid visitará el José Zorrilla.

El entrenador, Sergio González, ha elaborado una lista en la que figuran los jugadores del filial El Hacen, Kike Pérez, Alende y Miguel.

Jugadores como Fede Barba y Álvaro Aguado no han entrado en la convocatoria porque, como ha explicado Sergio González, «su salida del club está en la recta final».

Por su parte, Javi Sánchez podrá jugar «sus primeros minutos» en un partido oficial, algo que alegra especialmente al técnico, ya que «es un jugador que ha tenido mala suerte con las lesiones pero es trabajador, constante y se merece poder contar con minutos para ir teniendo ritmo de competición».

Al ser una eliminatoria a partido único, el único objetivo es el de ganar y «pasar a la siguiente ronda», de ahí que el entrenador haya elegido a jugadores con ganas de reivindicarse y que no tengan en la cabeza la llegada del Real Madrid en liga, este próximo domingo.

Sergio González es consciente de que jugar en las islas «no es fácil», no solo por el largo desplazamiento sino porque también «influye mentalmente», pero para eso es importante tratar de aislarse del escenario y «conseguir ser nosotros mismos haciendo el juego que sabemos hacer», ha explicado en una rueda de prensa.

Tras haber obtenido un empate ante Osasuna en liga, con un cambio en el esquema táctico, pasando del 4-4-2 al 5-3-2, con tres centrales, Sergio González se plantea volver a repetirlo cuando la situación así lo requiera, puesto que le permite contar con otra opción más para sorprender a los rivales.

Como comentó en la anterior cita de Copa, el técnico comentó que no pasar de ronda «no supondría un fracaso sino un mazazo», puesto que el Valladolid «tiene la responsabilidad, como equipo de Primera, de mantenerse en la competición», pero «a un partido pueden ocurrir muchas cosas» y, además, «si se juega bien, nunca se fracasa, aunque se pierda».

El Tenerife logró en apenas quince minutos dejar casi petrificado al Real Valladolid y apearlo de la Copa del Rey, al remontar un tanto de Sandro con goles de Josule y Dani Gómez.

La hipotética diferencia de cualificación futbolística entre una y otra plantilla quedó ya evidente desde los instantes iniciales del encuentro, puesto que los vallisoletanos pronto asumieron un rol bastante más dominador que el equipo tinerfeño, que se limitó principalmente a contener las acometidas de su rival.

En el primer minuto de juego el atacante visitante Sandró trató de sorprender a Ortolá con un disparo desde la frontal, pero el balón acabó en las manos del meta, mientras que en el minuto 11 fue el canterano Elliot el que remató un centro de Luis Pérez, pero el balón se fue finalmente junto a la cepa del poste derecho de Caro.

Nacho dispuso en el minuto 16 de otra excelente ocasión para desnivelar el marcador, pero su disparo desde cerca del punto de penalti acabó de nuevo en las manos de Ortolá, mientras que al filo de la media hora fue primero Joselu y luego Elliot los que pusieron en un brete a Caro, tras un error del propio cancerbero.

Con ambos equipos emplazados en la parcela defendida por los insulares concluyó una anodina primera parte, para reanudarse el juego poco después con unas perspectivas mucho más atrevidas, sobre todo por parte de los tinerfeños, que tras el descanso no mostraron tanto recelo.

Pero en el minuto 51, un pase de Óscar Plano sobre Sandro permitió al atacante situarse frente a Ortolá y, tras rematar a las manos del cancerbero, aprovechó el rechace del meta para, de espuela, abrir el marcador.

Pero los tinerfeños se repusieron y en el minuto 66 un centro desde la izquierda de Moore permitió al debutante Joselu, en boca de gol, cabecear a la red defendida por Masip, aunque, previamente Alberto, también de cabeza, ocasionó un sobresalto al meta tras cabecear un córner lanzado por Milla.

El empate no sólo espoleó al cuadro insular, sino que, además, lo llevó casi a cercar a su rival en su propio campo, alcanzando un momento de auténtico delirio en el minuto 85 cuando Dani Gómez anotó de penalti el segundo tanto para su equipo, después de ser derribado por el defensor Alende.

De aquí a la conclusión del encuentro ya prácticamente poco ocurrió, puesto que los vallisoletanos se veían casi imposibilitados para, al menos, marcar un nuevo tanto con el que mantener vivo el sueño de continuar en competición, suerte que finalmente se decantó del lado tinerfeño.