María López: «Aunque me duela dejar la Selección Española, es la decisión correcta»

Pudiera pensarse que, a sus 34 años, la asturiana, forjada en el Grupo Covadonga, haya empezado a dar síntomas de agotamiento. Al contrario. «Yo me siento bien. De hecho, hace tres meses estaba en los Juegos. Tambíen es cierto que en mi posición, en la defensa, no necesito a lo mejor la velocidad de las delanteras para rendir. Pero, no. Me siento bien», asegura. «Era algo que llevaba pensando un tiempo atrás, retirarme después de la cita olímpica de París», puntualiza.

María López, referente de ese vestuario de la Selección, estandarte de un grupo lanzado, se coloca a un lado voluntariamente. «Toca cerrar una etapa maravillosa en la que, desde categorías inferiores y durante casi 20 años, he gritado más de 300 veces el 'Força, Indarra, Fuerza, España'. Cada himno, cada pitido inicial, suponían momentos muy especiales. De orgullo por representar a mi país y por estar donde había luchado tanto por estar», manifiesta la gijonesa, con 226 partidos jugados en la absoluta.

Después de una larga y provechosa carrera deportiva, salpicada por la medalla de bronce en el Mundial 2018, otra presea del mismo color en el Europeo de 2019 y tres diplomas olímpicos, además de un sinfín de éxitos con su club, mantiene esa sonrisa que la ha caracterizado. El tiempo y su calidad han demostrado que estaba hecha para jugar, para competir con las mejores. «Quizás me queda la espinita de una medalla olímpica», reconoce la jugadora, que ha dejado a un lado muchas cosas por darle prioridad a la Selección. «Es el momento de disfrutarlas», afirma la gijonesa. Siempre ha recibido el cariño de la afición y hasta de su compañeras y rivales. «Mis amigas de las RedSticks también lo están dejando, se quiere hacer un cambio generacional y, al final, creo que estas dos coas han influido también en mi decisión», hace hincapié.

Además de una defensa descomunal, a esta licenciada en Administración y Dirección de Empresas, que trabaja en la Federación Española de Hockey, con su decisión de abandonar la Selección, se le abre un mundo: «Quiero estar más con mi familia, además ahora tengo un sobrino de dos años. Espero disfrutar de tiempo de calidad con mis amigos y, lues, laboralmente, probablemente buscar nuevas oportunidades».

«¿Hacia dónde va mi futuro? No lo sé. Si tiene que estar ligado al hockey o al deporte general, genial porque sería continuación con mi pasión, pero si me lleva por otros lados, también será bienvenido», argumenta María López, cuyo móvil no ha dejado de sonar desde que trasladó públicamente su decisión. «Estoy un poco abrumada por todos los mensajes de cariño que estoy recibiendo. Se agradecen porque, aunque haya tomado la decisión, siempre te da un poco de vértigo el ver qué pasará».

Su vida ligada a la Selección absoluta toca a su fin después de 14 años. «En breve va a salir una nueva convocatoria y, no le miento, será muy raro», dice la jugadora, que seguirá ligada al hockey con su equipo, el Club de Campo Villa de Madrid: «Aspiramos a todo, estoy muy ilusionada».