Nairo viene a conquistar Asturias

El día se inició con una escapada de dos corredores. El dúo lo formaron el portugués Daniel Viegas (Eolo-Kometa) y el español José Gutiérrez (Gios). Tal y como había adelantado un día antes Carlos Barredo, preparador físico del Eolo-Kometa, el equipo montado por Alberto Contador buscó la victoria de etapa, aunque tanto a uno como a otro, que cabalgaron gran parte de la jornada escapados, se les hizo demasiado largo el recorrido.

Tanto el portugués como el español llegaron a aventajar al pelotón en tres minutos, pero el grueso de corredores tuvo controlada la escapada y no dio opciones Ni a Viegas ni a Gutiérrez para poder alzar los brazos en la línea de meta fijada en el centro de Pola de Lena.

Tal y como había solicitado la organización de la carrera, el público que acudió al encuentro del pelotón por las carreteras asturianas cumplió en todo momento con el protocolo sanitario. Las mascarillas y el distanciamiento de un metro y medio se respetaron a rajatabla por la gran mayoría de aficionados que no quisieron dejar escapar la oportunidad de animar a los 102 corredores que tomaron la salida de la presente edición de la Vuelta a Asturias.

Mientras el pelotón pedaleaba en busca de los dos escapados, los grandes favoritos tanto a la etapa como a la clasificación general aguardaron pacientes su oportunidad. La última subida de la etapa, un alto de tercera categoría como es el Alto de Carabanzo, de algo más de un kilómetro y medio de distancia, fue decisiva ayer. A falta de quince kilómetros para el final, la escapada fue interceptada por un pelotón al que el Movistar le marcaba el ritmo para intentar endurecer el final de etapa. Fue entonces cuando el español Héctor Carretero probó fortuna en solitario, pero Nairo no le dejó hacer.

El colombiano rompió toda tranquilidad con un ataque tan duro como efectivo. Nadie pudo seguirle. En medio del Alto de Carabanzo, el ciclista del Arkea se situó al frente de la carrera. Mientras se distanciaba del grupo, Pierre Latour -otro de los favoritos para llevarse la carrera- alcanzó a Nairo y ambos iniciaron el descenso que les llevaría hasta Pola de Lena.

Lo que parecía que iba a acabar en un pacto entre ambos para aumentar la ventaja con el pelotón terminó con un gigante Quintana, que decidió comenzar la Vuelta a Asturias por todo lo alto. El colombiano no dio ninguna opción a Pierre Latour. No tuvo rival. Encaró los últimos kilómetros en solitario para cruzar la línea de meta sin oponentes. Los focos se centraron en un Nairo que alzó los brazos al cielo para celebrar su victoria y, de paso, para confirmar su aspiración de hacerse con la clasificación general.