El Liberbank Gijón de la Liga Iberdrola de Balonmano suspendió ayer el primer entrenamiento de la semana, en el Pabellón de La Arena, al conocer que su rival del pasado sábado, La Salud de Tenerife, confirmó dos positivos por covid-19 su plantilla.
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Tras tener conocimiento de ello, el club gijonés lo comunicó a la Consejería de Salud del Principado, que ordenó la suspensión de toda actividad del equipo. Por el momento, las jugadoras han quedado confinadas en sus domicilios hasta nueva indicación por parte de las autoridades sanitarias.
La entrenadora, Cristina Cabeza, comentó que «por el momento dejamos de entrenar y nos quedamos en casa a la espera de que nos comuniquen qué es lo que debemos hacer». Casi con toda probabilidad, las componentes del plantel del Liberbank Gijón tendrán que someterse a exámenes.
EL COMERCIO ya informó en la previa del partido que La Salud se había enfrentado una semana antes el Granollers, que registró varios casos de covid-19. En este sentido, la expedición del equipo asturiano viajó a tierras canarias con el temor de una posible suspensión.
El Liberbank no tendrá el sábado partido al jugarse la Supercopa. Reanudará la liga el 7 de noviembre ante el Elche.
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