Duelo de necesidades

Después de sumar la octava derrota de la temporada, la cuarta de manera consecutiva, el Liberbank Oviedo Baloncesto afronta esta noche, desde las 20.30 horas, el encuentro ante el ICG Força Lleida que fue aplazado el pasado mes de octubre, a consecuencia de la huelga general que tuvo lugar en Cataluña.

El de esta noche será un duelo de necesidades entre ambos equipos, puesto que ovetenses y catalanes llevan más de un mes sin lograr la victoria, y presentan actualmente las peores rachas de la LEB Oro, junto al colista Marín.

Javi Rodríguez tendrá nuevamente quebraderos de cabeza para poder dibujar su cinco, ya que los ovetenses acuden al Pavelló Barris Nord con las bajas por lesión de sus pívots, Óliver Arteaga y Devin Wright, así como de sus dos últimos fichajes, Davis Geks y Jorge Sanz, quienes no podrán tomar parte en el choque, al no tener ficha con el cuadro azul en el momento en el que tuvo que disputarse el mismo.

Además el técnico de Porriño estará pendiente de la evolución de José Blázquez, ausente el viernes en Cáceres, y de Sergio Llorente, quien tomó parte en ese partido con un vendaje en su rodilla. Por estos motivos el canterano Sergio Arias volverá a entrar en la convocatoria, la cual completan Álex Reyes, Víctor Pérez, Matti Nuutinen, Rolandas Jakstas y Alejandro Rodríguez.

Los ochos guerreros ovetenses se medirán a un Lleida que tampoco atraviesa por su mejor momento, al ocupar la décimoquinta posición de la tabla, la primera que da la permanencia, con un balance de tres triunfos y siete derrotas.

El equipo que dirige Jorge Serna tampoco se libra de las lesiones, y tendrá las bajas del pívot Pa Mor Diene con problemas en el sóleo, y del alero Mike Carey, a consecuencia de unas molestias en las cervicales.

Quienes en cambio sí estarán sobre el parqué son el ala-pívot Eric Stutz y el pívot Shaq Cleare, los dos mejores jugadores catalanes en esta primera fase de la competición liguera. El ala-pívot norteamericano es el segundo máximo reboteador de la categoría, con una media de 8,7 rebotes por encuentro, y el tercer hombre que más tapones pone, al promediar 1,8 por partido.