Moha Bakkali suma un lustro en lo más alto de la San Silvestre de Pola de Siero

Pola de Siero recupera el espíritu de la San Silvestre. Las calles de la capital polesa volvieron a vivir una intensa jornada de atletismo, pasada por agua por momentos, en la que el corredor sierense Moha Bakkali —victorioso en la Carrera de Nochebuena disputada el sábado en Gijón— ganó por quinto año consecutivo y la corredora del Universidad de Oviedo María Suárez se impuso por segundo año seguido. Los ganadores estuvieron acompañados de medio millar de corredores que desde primera hora de la mañana convirtieron Pola de Siero en una pequeña villa olímpica con sus calentamientos.

La jornada comenzó a las once con la San Silvestre de los más pequeños. Con el dorsal 805 y tan solo siete años de edad, Marcos Arduengo no estaba nervioso en la línea de meta. «Creo que lo he hecho muy bien», presumió. A su lado, su amiga Carla Fonseca, de once años, repitió en la prueba sierense y en la que confesó sentirse «muy cómoda». La prueba de los futuros corredores terminó sin incidencias para dejar paso la general.

La participación fue masiva y sin duda recordó a la carrera vivida en el año 2019, antes de que la pandemia irrumpiese en el concejo. Y no solo por la participación ya que los ganadores fueron los mismos. A la una de la tarde, puntales, los corredores salieron de uno de los laterales de la Plaza Cubierta. Las ganas de los participantes se notaron desde el primer segundo uno, que imprimieron un ritmo atroz durante el circuito de más de 4 kilómetros.

Los polesos volvieron a ser testigos de lujo de la rivalidad sana entre Moha Bakkali y Alejandro Díaz, que tras cinco minutos de prueba lograron abrir una brecha con el resto de participantes. El duelo estaba más disputado que nunca y a falta de un kilómetro un ataque del corredor sierense dejó sin fuerzas al del corredor inscrito en el Oriente Atletismo. «Llevamos doce minutos así que no tardarán en aparecer por la calle», comentó el narrador a los asistentes. Segundos más tarde, Bakkali apareció en solitario, con una ventaja de diez segundos, por la calle Alcalde Parrondo para conquistar por quinto años consecutivo la San Silvestre de Pola de Siero. «Ganar siempre presta, pero hacerlo en casa delante de tu gente y familia es muy especial», dijo tras cruzar la línea de meta.

Dos minutos y medio más tarde la lavianesa María Suárez García lo hizo para subirse al primer escalón del podio por segundo año consecutivo. En esta ocasión decidió imprimir a su rival Laura Gión, segunda clasificada, un ritmo agobiante desde el inicio de la prueba ya que esta le había ganado en una prueba la semana pasada. «Pensé que si aguantaba hasta que terminase la parte de subida luego la bajada sería mucho más fácil de llevar; tuve muy buenas sensaciones y siempre intenté ir con alguien para no tener que marcar yo siempre el ritmo», explicó.

No todo fue competición en la San Silvestre de Pola de Siero. Como todos los años, también hubo tiempo para el disfrute y las bromas. Y sino que se lo digan a Miguel Sánchez, quien decidió acudir con un pintoresco disfraz de payaso para realizar la prueba. «Es un poco agobiante para correr, pero la alegría debe primar sobre todo y más en los tiempos que corren», aseguró. A lo que su hijo, Miguel, respondió: «El año que viene me animo yo también con el disfraz». Por otra parte, Quique Oltra decidió acudir con un compañero muy especial: 'Jazz'. Un perro de raza lobo checoslovaco con el que habitualmente participa en carreras especializadas. «El me marca el ritmo, aunque ya me gustaría correr como él, muchas veces tengo que pararle», dijo, entre risas.

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