Secciones
Servicios
Destacamos
J. L. GONZÁLEZ / AGENCIAS
Lunes, 4 de marzo 2019, 02:12
Cuando el fotoperiodista Chema Conesa se reunió con los responsables de DKV para preparar una exposición sobre el trabajo de 40 compañeros suyos en activo, le pidieron un título. No era fácil sintetizar el trabajo de profesionales que trabajan en conflictos bélicos, desastres ... naturales, cubriendo la actualidad de regímenes dictatoriales. De la mente del comisario de la exposición que se puede ver hasta el 28 de abril en el Círculo de Bellas Artes de Madrid y que en los próximos meses recalará en Gijón salió una idea: 'Creadores de conciencia'. «Cada día cuesta más crear conciencia, cada día resulta más difícil porque estamos saturados de imágenes», destaca Lurdes Basolí, una de las 40 fotoperiodistas que prestan su mirada a esta exposición.
En el recorrido por lo más destacado del fotoperiodismo español no podían faltar los dos únicos profesionales que cuentan con un premio Pulitzer: los asturianos Manu Brabo y Javier Bauluz. Al igual que el resto de sus compañeros, prestan tres imágenes de su trabajo a esta muestra en la que están representados los conflictos más cruentos de los últimos años, así como sus consecuencias.
En esta muestra convive el trabajo de reputados veteranos del oficio, como Gervasio Sánchez, que aporta tres imágenes de sus coberturas en los Balcanes, Sierra Leona y Guatemala, con el de jóvenes como Antonio González Calero, que sigue trabajando en una carnicería familiar, trabajo que compatibiliza con las cámaras, según explicó Chema Conesa en la presentación de la exposición, en la que estuvo acompañado por algunos de los fotógrafos participantes.
Uno de los fotoperiodistas que acudieron a la inauguración en Madrid fue Ricardo García Vilanova quien, junto a Ricardo Espinosa, pasó varios meses secuestrado en Siria, un país en el que ha trabajado nueve años cubriendo la guerra que asola su territorio. Las imágenes de García Vilanova reflejan el horror de uno de los peores conflictos bélicos de este siglo y del que ha sido testigo de excepción. «Esta foto es de agosto de 2012, cuando el régimen de Al Assad bombardeaba indiscriminadamente a la población civil», explicó a los asistentes a la inauguración comentando una foto de Alepo. «Era terrible la cantidad ingente de niños heridos y muertos a diario», comentó este fotógrafo zaragozano sobre sus visitas a Siria, uno de los escenarios más representados en la muestra, así como Afganistán, el Mediterráneo, África o Centroamérica.
No hace falta irse tan lejos para descubrir el trabajo de estos profesionales. Lo demuestra Olmo Calvo, quien presenta dos imágenes de conflictos internacionales, pero también una de un desahucio en Madrid en la que se observa desde la mirilla de la vivienda a los agentes de la Policía apostados en el descansillo para ejecutar el desalojo. «Olmo sabe ponerse en la piel de la gente, y esto es lo que se ve en la mirilla cuando vienen a desahuciarte. Es como en el cine, un plano de una cámara psicológica», destacó Chema Conesa.
La valla de Melilla es también un escenario recurrente en la exposición como símbolo de los problemas y barreras que se encuentra la población migrante en todo el mundo. Un compendio de temas de actualidad bajo la mirada de algunos de los más lúcidos fotoperiodistas que solo tiene un objetivo: remover conciencias.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.