La Soleá Morente más íntima seduce en el Jovellanos

La Soleá más flamenca arrancó con guiños al maestro y sus 'Alegrías de Enrique', para adentrarse en los temas de su nuevo disco 'Mar en calma', impregnado de esa tradición, con canciones como 'Babilún', 'No temas nada' o 'Sueño'. Recordó emocionada su paso por ese mismo escenario acompañando a su padre y a su hermana Estrella, y tras el aplauso cómplice del público, daría paso a su versión de 'Palabras para Julia'. Tras ella, desvío a su veta indie con 'Marcelo Criminal' y 'Lo que te falta', antes de sacar todo su arte en un clásico rescatado en el último álbum, 'La Chambelona', jaleada por las palmas del público y todo el ritmo desbocado de sus músicos. Así enlazaba con 'Cosas buenas'.

«¿Queréis una rumba o una lenta?», preguntó la granadina y, ante la respuesta unánime por lo primero, se lanzó al baile con 'Viniste por mí'. Nuevo tributo al gran Morente con una personal 'Mírame a los ojos' y una divertida e ineserada despedida con 'Ducati' fueron sentenciando el concierto. Añadió después una propina igual de juerguista y discotequera: 'No pensar en ti', de Raffaella Carrá. Y en idéntico tono, su 'Gitana María', con la parroquia bailando en pie. 'Baila conmigo' puso el punto y final a la noche.

Soleá única y auténtica, le viene de familia.