«La burbuja de OT es efímera y te arrastra, cuando se diluye solo te queda trabajar»

-El papel de Sam en 'Ghost ¿es un caramelo?

-Sí lo es. Esta oportunidad ha sido un regalo, porque es uno de mis musicales favoritos. La peli es un icono, pero este musical es muy bueno, los montajes se han hecho muy bien y son muy atractivos. Este personaje me lleva a otros lugares y otros momentos, me divierto mucho cuando lo interpreto porque es muy diferente a mí.

-No es el primer musical en el que participa. ¿Alguno que le guste más que otro?

-'Ghost' es mi primer musical de gran formato en la Gran Vía de Madrid, y ahora seguimos con gira nacional. Sí tengo un gran recuerdo de 'Rent', porque fue el primero que hice en Mallorca, muchos de mis amigos de hoy salieron de ese musical.

-En este musical hay un gran montaje y muchos trucos escenográficos.

-Lejos de ser una pastelada, es muy divertido. Tiene comedia, tiene trucos de magia y visuales en directo y la música es muy buena. Después, hay un gran equipo técnico, lo llevamos a Oviedo tal cual se vio en Gran Vía.

-¿Qué supuso para su carrera entrar en OT?

-Me vino muy bien, no voy a renegar de ello porque ha sido el mejor casting en el que me han dicho que sí. Me cambió la vida. Entrar en la televisión te permite llegar al salón de la gente, nos vino muy bien a todos. Es una gran plataforma, pero hay que saber utilizarla. La burbuja del programa te arrastra, formas parte de un fenómeno efímero. Pero cuando se diluye, tiene que quedar el trabajo, el esfuerzo.

-¿Ya está el sector recuperado de la pandemia?

-Todavía hay que recuperarse un poco más. Los musicales empiezan a girar, los artistas vuelven a los conciertos... Pero muchos se han quedado por el camino, y hay gente que tiene problemas para volver. Yo tuve la suerte de que estuve en la televisión y mantuve mi presencia, pero di muchos menos conciertos.

-A finales del año pasado sacó su primer disco, tras adelantar varios 'singles'. ¿Está satisfecho con el resultado?

-Sacar un disco es un lujo que hoy en día nos podemos permitir unos pocos. El disco físico ya no es lo que era, pero yo tenía ganas de que estuviese en las tiendas. Está ahí y se puede escuchar. Hoy (por ayer) podré cantar un par de canciones en la celebración del Orgullo en Madrid. Es un paso más en mi carrera. No esperaba llenar estadios, pero sí mostrar lo que puedo hacer.

-Lo cierto es que ahora es más momento de canciones en internet que de discos físicos. ¿Qué le parece?

-No lo sé. Me hubiese gustado vivir ese momento en el que las carreras musicales eran más estables. Ahora la industria es muy competitiva. Todo es muy rápido, muy efímero. Las canciones mueren muy rápido, tienen un par de semanas de vida y desaparecen. Lo bueno es que hay más sitio para todos, y las plataformas ayudan a que se te vea. Todo evoluciona, la época del streaming está aquí y así son las cosas. Antes había una pecera muy grande con unos cuantos peces y ahora es un océano enorme en el que no se sabe cuántos peces hay.

-Le ficharon como presentador en 'The language of love', un reality para Channel 4 en Inglaterra... ¿Cómo fue eso?

-Lo grabamos el año pasado en Málaga, todo en inglés, pero fue otra oportunidad muy buena que no pude rechazar. Fui a Londres a hacer las promociones y fue todo muy bien. Nunca me lo habría imaginado. Es un poco surrealista. Pero es que en televisión me lo paso muy bien, es un lugar muy divertido. Las oportunidades que pueda compatibilizar, las voy a coger.

-¿Ha dejado aparcado lo de hacer cine?

-Sí, lo dejé un poco aparcado. Siempre he escrito y ahora lo hago menos. Estudié comunicación y me especialicé en guion, pero ahora estoy centrado en la faceta de actor y cantante. Quién sabe en el futuro.