Broche a tres llenazos de pasión góspel en Gijón

Ana Ranera

Gijón

Martes, 24 de diciembre 2024, 01:00

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Una ovación dio ayer la bienvenida a The Mississippi Mass Choir, el grupo que cerró el festival Grandes del Góspel en el Teatro Jovellanos de Gijón, con un derroche de energía, de voz y de baile que cautivó al respetable desde la ... primera nota y desde la primera frase. Con un acento americano imposible de disimular, una de las cantantes dio la bienvenida al espectáculo y lanzó un «os quiero» al público, que se metió ya unos cuantos corazones en el bolsillo. Su esfuerzo por hablar en español se ganó las primeras sonrisas en una velada de celebración porque este certamen musical que patrocina EL COMERCIO festejaba sus treinta años. Tres décadas en las que los llenazos han sido una constante, tal y como se vio este fin de semana y anoche en la ciudad. Nadie se quería perder este viaje a las raíces americanas con aires celestiales y talento arrollador. Hubo canciones que invitaron a la calma (pocas) y la mayoría animaron a deshacerse en bailes y en palmas porque la formación al completo hizo del recital una fiesta a la que apetecía sumarse. Gijón tenía aires de Nueva Orleans y el Jovellanos se entregó a la causa en vísperas de la Nochebuena, primero con timidez y luego con desinhibición.

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Según fue avanzando la velada, se fueron calentando las ganas de ser parte de este gran coro de góspel, que hasta se atrevió con un emocionante 'Noche de paz'. Iban saltando de canción a canción con momentos en los que algún solista dejaba ver su voz apoteósica y le arrancaba vítores espontáneos al respetable. Derrochaba The Mississippi Mass Choir tanta alegría sobre las tablas que hasta parecía fácil lo que hacían, pero no lo fue. El talento de esta formación quedó patente y valorado por el Teatro Jovellanos que acabó la noche en pie, agradeciendo a los cantantes cada melodía, el preludio perfecto para unas fiestas que empiezan ya. Realmente, empezaron anoche en el escenario con los saltos y los brazos en alto de quienes los admiraron y compartieron con ellos unas coreografías para descorchar la Navidad con felicidad. Como tiene que ser.