El Juli, torero de Gijón

No es la primera vez que El Juli se encierra con seis toros a lo largo de su carrera, pero, probablemente sí sea la última. Esta figura de época, que tiene anunciada su despedida el próximo 1 de octubre en la Real Maestranza de Sevilla, ha querido decir adiós a El Bibio a lo grande. Y a lo grande es anunciándose como único espada en el festejo que supone el eje central, además de uno de los principales reclamos, de la vuelta de los toros al coso gijonés.

Desde que debutara en el coso ubicado en la carretera de Villaviciosa, allá por 1999, El Juli ha hecho diecisiete paseíllos que cuenta, en su gran mayoría, por éxitos. Los aficionados más veteranos aún recuerdan su faena a un sobrero de Conde de Mayalde, que hizo a El Juli torero de esta plaza y puso en circulación a la divisa de Don Rafael Finat. Sendos mano a mano con Perera y Manzanares en dos años consecutivos (2008 y 2009), o la tarde de 2015 en la que compartió salida en hombros con Ponce y el propio Perera lo ratifican como ídolo de esta afición.

Sus últimas lecciones en el centenario edificio neomudéjar se sitúan en 2018, el año que cumplía veinte años de alternativa y cuya presencia fue el hilo conductor de la feria, y en 2021, en la que es hasta ahora la última edición del serial. En la primera de ellas rivalizó de verdad con Manzanares y Talavante, mientras tres años abrió la Puerta Grande junto a Daniel Luque.

En cuanto a ganaderías, El Juli ha lidiado en nuestra plaza toros de hasta catorce vacadas diferentes; la más repetida: Domingo Hernández - Garcigrande.