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Cometcon, el gran evento de ocio alternativo que vuelve cada septiembre a Gijón, abría ayer sus puertas en el recinto ferial Luis Adaro en una nueva edición dispuesta a sorprender y a encandilar a todos los seguidores habituales de los mundos presentes en esta cita: cosplay, videojuegos, coleccionismo, cómic, rol, música y literatura de fantasía.
Sin inauguración oficial, debido al luto decretado en Gijón a causa del trágico accidente en El Musel, y con una jornada de lluvia, el festival echaba a rodar con numerosa afluencia de visitantes, especialmente en el horario de tarde y una animada atmósfera extendiéndose por cada uno de los pabellones temáticos. A la entrada del Central, uno de los espacios que reúne la mayor concentración de actividades y la zona comercial, se daba cita un grupo de cosplayers mierenses: Sira Delgado Peña, Deva Suárez, Catalina López, Alicia García y Camilo Kubiak. «Somos habituales, normalmente venimos los tres días. Lo que más nos mola es comprar en los puestos de artistas y sobre todo el concurso de Cosplay, aunque no nos presentamos, vendremos a verlo y a encontrarnos con gente a la que conocemos de otros años», afirmaban. El mal tiempo no les desanimaba: «Hombre, presta más cuando está bueno y anda todo el mundo por ahí, pero mejor así que con calor, porque a veces los trajes te agobian. Nos da lo mismo, vamos a divertirnos igual».
Con idéntico ánimo acudían Martina Hernando, de Nava, y su amigo Juan Alonso, de Ribadesella. Ella, caracterizada de Dva de Overwatch, aseguraba que «lo que más me gusta son los disfraces de la gente porque puedes ver diferentes mundos artísticos, estilos, maquillaje; suele inspirarme este ambiente». Y él, encarnando al Joker de Heath Ledger, no tenía reparo en confesar que «mis razones son que aquí podemos hacer más o menos el payaso vestidos de estupideces sin que nos llamen frikis». Una opinión que Martina refrendaba: «Sí, somos un mundo de raritos. Y esta es una forma de pasar un finde diferente con gente similar a ti en tus gustos y en tu peculiaridad».
Cerca de ellos, otra pareja, en este caso de gijoneses: Laura Arias, con un impactante disfraz de Bela Dimitrescu, y Adrián Fuertes, sin ningún complemento de cosplay, daban cuenta de sendos bocados recién adquiridos en la zona de foodtrucks. Ella se declaraba fan de las propuestas presentes en Cometcon: «Me encantan los disfraces, los videojuegos y las cosas que comprar, soy coleccionista de Hello Kitty», mientras él asentía: «A mí me llama este mundo, pero no tanto. Venimos para ver un poco todo lo que hay».
Y lo que había en cada rincón del festival era suficiente y más para escoger, detenerse en lo que a cada uno más le atraía o simplemente pasear por los diversos espacios. Así, en el auditorio del Pabellón Divertia Gaming, el aforo llenaba prácticamente todas las butacas para presenciar el Concurso Comet Talent, mientras en la primera planta no era menor el público que se congregaba atraído por los juegos de mesa y de rol, disputando partidas frente a las pantallas de deporte virtual y en las consolas retro o haciéndose selfies en la zona de Photocalls. Similar concurrencia, en la zona de juegos del Pabellón Fundación Cajastur- PCBOX y en torno a los torneos que se celebraban. Pero, sin duda, la mayor animación se registraba en el Pabellón Central, por los pasillos del mercadillo y en los diversos alicientes que asaltaban al visitante por cada lugar. Una gran jornada inaugural para un festival que aún tiene mucho que ofrecer hoy y mañana.
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